/ sábado 19 de diciembre de 2020

El Agua cotiza en Wall Street

Como el oro, o el petróleo en su momento, la escasez de agua ha hecho que este bien entre en los mercados de Wall Street, donde desde el pasado 7 de diciembre ya cotiza en bolsa, arrancando con un precio de 486.53 dólares por acre-pie (1,233 metros cúbicos) en el día de su lanzamiento.

Esto ha causado gran conmoción en el sector, no se identifican aún con mucha claridad cuales pueden ser los impactos de esta medida, se habla de un posible acaparamiento del agua por las empresas mas grandes y poderosas, y en un contexto de gobierno como el que tenemos hoy en México, eso es razón suficiente para descalificar cualquier posibilidad.

Pero antes de causar más controversia, debo decir que eso se dio en Estados Unidos, y ni siquiera para todo el país, sino sólo en el Estado de California, donde las condiciones legales, institucionales y económicas, permiten la producción de productos de alto valor agrícola y un control muy estricto de los derechos de uso del agua. En México no existen (ni remotamente) condiciones para implementar algo similar.

Sin embargo, es algo digno de estudio, los especialistas en agua no somos especialistas en finanzas, quizá de ahí el miedo a este tema. Hay muchas cosas que comentar:

Primero, el uso del agua se ha negociado entre agricultores desde tiempos inmemoriales, esto siempre ha funcionado de manera informal en muchos lugares del mundo, "un agricultor A le dice al B, este mes no voy a regar, te cedo mis derechos a cambio de una compensación". Lo que es mucho menos común es la existencia de un mercado formal para realizar estas transacciones de derechos, que es justamente lo que en el estado de California si ha existido desde hace tiempo.

Segundo, lo que empezó a cotizar en Wall Street no es el agua en sí misma, sino los derechos de uso. En casi la totalidad del planeta, las leyes consideran el agua como un bien común del dominio público. No obstante, es posible otorgar derechos de uso de esa agua a través de concesiones o licencias administrativas.

Tercero, lo que se adquiere es un precio garantizado en el futuro. Desde hace mucho tiempo en California existe un mercado formal de derechos de uso del agua, existen registros de esos acuerdos y los precios a los que se paga por metro cúbico, ese precio se ha duplicado en los últimos meses, y es muy probable que el cambio climático, el crecimiento demográfico, las sequías y la contaminación añadan aún más estrés hídrico a la región, por lo que se estima que los precios seguirán subiendo.

Cuarto, Nasdaq, la segunda bolsa de valores electrónica y automatizada más grande de Estados Unidos, desde el 2018 se asoció con Veles Water y WestWater Research para lanzar el Nasdaq Veles California Water Index (NQH20), el primer índice de precios del agua en California. Este índice permite realizar un seguimiento del precio al contado del agua en el estado de California, lo que representa la valoración actual del agua según las condiciones de oferta y demanda, y ofrece una mayor transparencia en su gestión.

El alto valor de este mecanismo reside en que, en el caso de sequía, el mercado de futuros permita acceder a este líquido con precios ya establecidos que permitan la producción agrícola.

Pero como todo, esta práctica no está exenta de riesgos. Riesgos que no se derivan tanto del instrumento en sí, como de su mal uso o de una deficiente regulación pública, lo que podría derivar en comportamientos especulativos que podrían llegar a afectar a terceras partes o a los ecosistemas acuáticos en su conjunto. Es fundamental una buena regulación pública para alinear intereses individuales y objetivos colectivos.

Como el oro, o el petróleo en su momento, la escasez de agua ha hecho que este bien entre en los mercados de Wall Street, donde desde el pasado 7 de diciembre ya cotiza en bolsa, arrancando con un precio de 486.53 dólares por acre-pie (1,233 metros cúbicos) en el día de su lanzamiento.

Esto ha causado gran conmoción en el sector, no se identifican aún con mucha claridad cuales pueden ser los impactos de esta medida, se habla de un posible acaparamiento del agua por las empresas mas grandes y poderosas, y en un contexto de gobierno como el que tenemos hoy en México, eso es razón suficiente para descalificar cualquier posibilidad.

Pero antes de causar más controversia, debo decir que eso se dio en Estados Unidos, y ni siquiera para todo el país, sino sólo en el Estado de California, donde las condiciones legales, institucionales y económicas, permiten la producción de productos de alto valor agrícola y un control muy estricto de los derechos de uso del agua. En México no existen (ni remotamente) condiciones para implementar algo similar.

Sin embargo, es algo digno de estudio, los especialistas en agua no somos especialistas en finanzas, quizá de ahí el miedo a este tema. Hay muchas cosas que comentar:

Primero, el uso del agua se ha negociado entre agricultores desde tiempos inmemoriales, esto siempre ha funcionado de manera informal en muchos lugares del mundo, "un agricultor A le dice al B, este mes no voy a regar, te cedo mis derechos a cambio de una compensación". Lo que es mucho menos común es la existencia de un mercado formal para realizar estas transacciones de derechos, que es justamente lo que en el estado de California si ha existido desde hace tiempo.

Segundo, lo que empezó a cotizar en Wall Street no es el agua en sí misma, sino los derechos de uso. En casi la totalidad del planeta, las leyes consideran el agua como un bien común del dominio público. No obstante, es posible otorgar derechos de uso de esa agua a través de concesiones o licencias administrativas.

Tercero, lo que se adquiere es un precio garantizado en el futuro. Desde hace mucho tiempo en California existe un mercado formal de derechos de uso del agua, existen registros de esos acuerdos y los precios a los que se paga por metro cúbico, ese precio se ha duplicado en los últimos meses, y es muy probable que el cambio climático, el crecimiento demográfico, las sequías y la contaminación añadan aún más estrés hídrico a la región, por lo que se estima que los precios seguirán subiendo.

Cuarto, Nasdaq, la segunda bolsa de valores electrónica y automatizada más grande de Estados Unidos, desde el 2018 se asoció con Veles Water y WestWater Research para lanzar el Nasdaq Veles California Water Index (NQH20), el primer índice de precios del agua en California. Este índice permite realizar un seguimiento del precio al contado del agua en el estado de California, lo que representa la valoración actual del agua según las condiciones de oferta y demanda, y ofrece una mayor transparencia en su gestión.

El alto valor de este mecanismo reside en que, en el caso de sequía, el mercado de futuros permita acceder a este líquido con precios ya establecidos que permitan la producción agrícola.

Pero como todo, esta práctica no está exenta de riesgos. Riesgos que no se derivan tanto del instrumento en sí, como de su mal uso o de una deficiente regulación pública, lo que podría derivar en comportamientos especulativos que podrían llegar a afectar a terceras partes o a los ecosistemas acuáticos en su conjunto. Es fundamental una buena regulación pública para alinear intereses individuales y objetivos colectivos.