/ viernes 6 de septiembre de 2019

El dengue...y Zapotitla

Muy probablemente la compra tardía de insecticidas haya agravado la incidencia altísima de casos de dengue que Morelos y el resto del país padecen.

Si hubieran faltado nebulizaciones a tiempo por la ausencia de los biológicos que acaban con los mosquitos vectores, bien podría criticarse ampliamente la acción del gobierno federal en Morelos. Pero el caso, según todo apunta, no es así, por lo menos en esta zapatista tierra.

Desde hace semanas el secretario de Salud del gobierno estatal, Marco Antonio Cantú, había advertido que muchas familias en la zona oriente rechazaban la visita de las brigadas de nebulización en una tasa que alcanzaba el 50 por ciento. Es decir, había insecticida, a lo mejor no mucho pero sí suficiente para atacar los criaderos, 6 millones detectados, que fueron abatidos y lograron que el incremento exponencial en los casos de dengue este año fuera mucho mayor. ¿Podría? Los epidemiólogos dicen que sí.

En 2018 se registraron en el estado 98 casos de dengue, los defensores de la administración anterior afirman que se debió a las exitosas campañas que desde el Ejecutivo se emprendieron para descacharrizar, nebulizar, y etcétera. Lo mismo ocurrió este año, hubo campañas similares pero el éxito fue mucho menor, como evidencian los 414 casos confirmados hasta la fecha. Lo que parece fallar es la participación de la población en las acciones preventivas de la salud, lo que en el caso de enfermedades infecciosas resulta hasta criminal, en tanto las omisiones de unos afectan la salud de muchos otros.

La falta de sustancias para fumigar difícilmente pegó en Morelos porque no se nebulizó en todos los sitios donde se debía, y eso porque la población rechazó las acciones de nebulización, como fue documentado en su momento. Es decir, no fue el problema de falta de sustancia, sino de la no utilización de la misma al cien por ciento por el rechazo de la población a las acciones preventivas de salud. Las razones del rechazo tendrán que analizarse con especialistas, pero es un enorme consuelo para las autoridades de salud el hecho de que la extensión de casos de dengue en el estado no se debe a la falla en el diseño de políticas de salud. Otros problemas, en cambio, sí son totalmente atribuibles a esos errores de diseño político, como la falta de médicos en las unidades de salud, la insuficiencia en el abasto de medicamentos, la desatención a pacientes con enfermedades específicas, y en fin. Siendo objetivos, poco se puede hacer en materia de políticas de salud si la población no coopera en las acciones de prevención. Convencerlos es un reto enorme, para el próximo año.

De inmediato se pagó el respaldo que el diputado Zapotitla ofreció al gobierno del estado denunciando reiteradamente que la fracción parlamentaria a la que pertenecía, Morena, trataba de chantajear al gobernador. En pocos días el diputado pasó de la ignominia parlamentaria en la que lo sumieron sus ex compañeros de bancada, a la coordinación parlamentaria del Partido Encuentro Social, el mismo del gobernador del estado y que abandera, por cierto, una ideología de centro derecha, en contraste con la izquierda, a veces recalcitrante, que defendía con los colores de Morena. (Abrimos acá un paréntesis para que recuperen el aliento quienes, sorprendidos hasta el tuétano se acaban de enterar de que el partido del gobernador, y por consiguiente su administración y diseño de políticas públicas no es de izquierda).

Zapotitla vendió caro su amor y se impuso a los otros dos tránsfugas que hoy integran junto a Alfonso de Jesús Sotelo, la fracción del PES en el Congreso y que con otros méritos le pudieron disputar el cargo. Por cierto, los dos diputados que se sumaron al PES vienen del PT, Andrés Duque Tinoco y José Luis Galindo Cortés.

Twitter: @martinellito

Correo electrónico: dmartinez@elsoldecuernavaca.com.mx

Muy probablemente la compra tardía de insecticidas haya agravado la incidencia altísima de casos de dengue que Morelos y el resto del país padecen.

Si hubieran faltado nebulizaciones a tiempo por la ausencia de los biológicos que acaban con los mosquitos vectores, bien podría criticarse ampliamente la acción del gobierno federal en Morelos. Pero el caso, según todo apunta, no es así, por lo menos en esta zapatista tierra.

Desde hace semanas el secretario de Salud del gobierno estatal, Marco Antonio Cantú, había advertido que muchas familias en la zona oriente rechazaban la visita de las brigadas de nebulización en una tasa que alcanzaba el 50 por ciento. Es decir, había insecticida, a lo mejor no mucho pero sí suficiente para atacar los criaderos, 6 millones detectados, que fueron abatidos y lograron que el incremento exponencial en los casos de dengue este año fuera mucho mayor. ¿Podría? Los epidemiólogos dicen que sí.

En 2018 se registraron en el estado 98 casos de dengue, los defensores de la administración anterior afirman que se debió a las exitosas campañas que desde el Ejecutivo se emprendieron para descacharrizar, nebulizar, y etcétera. Lo mismo ocurrió este año, hubo campañas similares pero el éxito fue mucho menor, como evidencian los 414 casos confirmados hasta la fecha. Lo que parece fallar es la participación de la población en las acciones preventivas de la salud, lo que en el caso de enfermedades infecciosas resulta hasta criminal, en tanto las omisiones de unos afectan la salud de muchos otros.

La falta de sustancias para fumigar difícilmente pegó en Morelos porque no se nebulizó en todos los sitios donde se debía, y eso porque la población rechazó las acciones de nebulización, como fue documentado en su momento. Es decir, no fue el problema de falta de sustancia, sino de la no utilización de la misma al cien por ciento por el rechazo de la población a las acciones preventivas de salud. Las razones del rechazo tendrán que analizarse con especialistas, pero es un enorme consuelo para las autoridades de salud el hecho de que la extensión de casos de dengue en el estado no se debe a la falla en el diseño de políticas de salud. Otros problemas, en cambio, sí son totalmente atribuibles a esos errores de diseño político, como la falta de médicos en las unidades de salud, la insuficiencia en el abasto de medicamentos, la desatención a pacientes con enfermedades específicas, y en fin. Siendo objetivos, poco se puede hacer en materia de políticas de salud si la población no coopera en las acciones de prevención. Convencerlos es un reto enorme, para el próximo año.

De inmediato se pagó el respaldo que el diputado Zapotitla ofreció al gobierno del estado denunciando reiteradamente que la fracción parlamentaria a la que pertenecía, Morena, trataba de chantajear al gobernador. En pocos días el diputado pasó de la ignominia parlamentaria en la que lo sumieron sus ex compañeros de bancada, a la coordinación parlamentaria del Partido Encuentro Social, el mismo del gobernador del estado y que abandera, por cierto, una ideología de centro derecha, en contraste con la izquierda, a veces recalcitrante, que defendía con los colores de Morena. (Abrimos acá un paréntesis para que recuperen el aliento quienes, sorprendidos hasta el tuétano se acaban de enterar de que el partido del gobernador, y por consiguiente su administración y diseño de políticas públicas no es de izquierda).

Zapotitla vendió caro su amor y se impuso a los otros dos tránsfugas que hoy integran junto a Alfonso de Jesús Sotelo, la fracción del PES en el Congreso y que con otros méritos le pudieron disputar el cargo. Por cierto, los dos diputados que se sumaron al PES vienen del PT, Andrés Duque Tinoco y José Luis Galindo Cortés.

Twitter: @martinellito

Correo electrónico: dmartinez@elsoldecuernavaca.com.mx

ÚLTIMASCOLUMNAS
lunes 23 de diciembre de 2019

La crisis que se asoma

Daniel Martínez

viernes 20 de diciembre de 2019

Otro round: ayuntamientos y ambulantes

Daniel Martínez

jueves 19 de diciembre de 2019

Libertad religiosa o imposición de cultos

Daniel Martínez

miércoles 18 de diciembre de 2019

Impacto de los minisalarios

Daniel Martínez

martes 17 de diciembre de 2019

Cuernavaca y los ausentes del diálogo

Nuevas Reglas

Daniel Martínez

lunes 16 de diciembre de 2019

Alcaldes: la crisis que viene

Daniel Martínez

viernes 13 de diciembre de 2019

SNTE y aguinaldos

Nuevas Reglas

Daniel Martínez

jueves 12 de diciembre de 2019

Cuauh y Lobito, el diálogo…

El homicidio del responsable de seguridad pública en Cuernavaca, David Juárez, fue el punto público de culminación del pleito

Daniel Martínez

miércoles 11 de diciembre de 2019

Violencia contra arte y cultura

Daniel Martínez

martes 10 de diciembre de 2019

La oposición también ausente

Nuevas Reglas

Daniel Martínez

Cargar Más