/ miércoles 18 de agosto de 2021

El regreso a clases y la polarización de los docentes

La tercera ola de contagios por COVID 19 sigue creciendo y el Presidente de México con risa burlona insiste en el regreso a las clases presenciales a partir del 30 de agosto para el ciclo escolar 2021 – 2022.

En los últimos 7 días se han registrado 139,403 contagios con un promedio diario de 19,915, lo cual demuestra el altísimo riesgo que correrán los niños, niñas y jóvenes al regresar a sus escuelas, aunque insistan en “el llueve, truene o relampaguee”, lo que ha ocasionado malestar en los padres de familias y docentes.

La Maestra Delfina Gómez, titular de la SEP, después de no aparecer en público durante unas semanas ha indicado también del regreso a las clases presenciales y para eso ha establecido el programa Retorno Seguro que es un curso en línea que proporciona capacitación e información para el regreso a clases presenciales, así como estrategias para ayudar a contener el virus entre los alumnos y tiene una duración de 10 horas y al finalizar se entrega un certificado de reconocimiento.

Todo esto suena bien, pero en la realidad el problema es más complejo ya que existen otras situaciones que atender como es la infraestructura de las escuelas para adecuar los salones de clase, laboratorios y talleres con ventilación adecuada para evitar la concentración masiva de dióxido de carbono (CO2) que servirá para que los estudiantes no inhalen aire que contenga el virus, otro factor fundamental a considerar y atender son los sanitarios, que deben estar funcionando en perfectas condiciones y el abastecimiento suficiente de agua potable.

Otra situación que ha ocasionado el anuncio del regreso a las clases presenciales son las posturas encontradas de los padres, ya que la última encuesta realizada por MITOFSKY que muestra que el 62.5% no quieren que se regrese a clases presenciales, un 26.3% queso y un 11.2 que aún decide, pero que a la autoridad educativa le tiene sin cuidado e insiste en el regrese aun con el semáforo rojo.

En lo que se refiere a las posturas de los maestros para el regreso a clases presenciales de igual manera existe la polarización, por un lado la CNTE, aliado de la cuatroté sigue estando en contra del regreso pero en los últimos días ha dicho que van a consultar a sus bases y “el SNTE manifiesta su compromiso de adhesión y apoyo a las acciones emprendidas por el Gobierno de México, a través de las secretarías de Educación Pública y de Salud, quienes de manera conjunta y en el respectivo ámbito de sus competencias suscribirán un acuerdo para el regreso a las escuelas”, pero la mayoría de los maestros no están de acuerdo en las clases presenciales, que es muy apresurado y hace falta acondicionar sus escuelas.

En el caso específico del magisterio de Morelos, la gran mayoría están en contra en el regreso, la sección 19 del SNTE ya fijó su postura a través de su secretaria general “Gabriela Bañón Estrada, respondió que las condiciones para la presencia física de la comunidad escolar en los planteles no están dadas”.

Por otro lado, la expresión disidente “El poder de la educación y la sociedad” antes Nuevo Sindicalismo, manifestó que no es tiempo para el regreso a clases y evitar poner en riesgo a los alumnos, dicho por su representante Fernando Salgado Delgado, así mismo se manifestó el Movimiento Magisterial de Bases (MMB) de no retornar a laborar de forma presencial.

Las maestras y los maestros han estado laborando de forma no presencial haciendo su mayor esfuerzo para cumplir con su compromiso de educar a la niñez y juventud de México.


La tercera ola de contagios por COVID 19 sigue creciendo y el Presidente de México con risa burlona insiste en el regreso a las clases presenciales a partir del 30 de agosto para el ciclo escolar 2021 – 2022.

En los últimos 7 días se han registrado 139,403 contagios con un promedio diario de 19,915, lo cual demuestra el altísimo riesgo que correrán los niños, niñas y jóvenes al regresar a sus escuelas, aunque insistan en “el llueve, truene o relampaguee”, lo que ha ocasionado malestar en los padres de familias y docentes.

La Maestra Delfina Gómez, titular de la SEP, después de no aparecer en público durante unas semanas ha indicado también del regreso a las clases presenciales y para eso ha establecido el programa Retorno Seguro que es un curso en línea que proporciona capacitación e información para el regreso a clases presenciales, así como estrategias para ayudar a contener el virus entre los alumnos y tiene una duración de 10 horas y al finalizar se entrega un certificado de reconocimiento.

Todo esto suena bien, pero en la realidad el problema es más complejo ya que existen otras situaciones que atender como es la infraestructura de las escuelas para adecuar los salones de clase, laboratorios y talleres con ventilación adecuada para evitar la concentración masiva de dióxido de carbono (CO2) que servirá para que los estudiantes no inhalen aire que contenga el virus, otro factor fundamental a considerar y atender son los sanitarios, que deben estar funcionando en perfectas condiciones y el abastecimiento suficiente de agua potable.

Otra situación que ha ocasionado el anuncio del regreso a las clases presenciales son las posturas encontradas de los padres, ya que la última encuesta realizada por MITOFSKY que muestra que el 62.5% no quieren que se regrese a clases presenciales, un 26.3% queso y un 11.2 que aún decide, pero que a la autoridad educativa le tiene sin cuidado e insiste en el regrese aun con el semáforo rojo.

En lo que se refiere a las posturas de los maestros para el regreso a clases presenciales de igual manera existe la polarización, por un lado la CNTE, aliado de la cuatroté sigue estando en contra del regreso pero en los últimos días ha dicho que van a consultar a sus bases y “el SNTE manifiesta su compromiso de adhesión y apoyo a las acciones emprendidas por el Gobierno de México, a través de las secretarías de Educación Pública y de Salud, quienes de manera conjunta y en el respectivo ámbito de sus competencias suscribirán un acuerdo para el regreso a las escuelas”, pero la mayoría de los maestros no están de acuerdo en las clases presenciales, que es muy apresurado y hace falta acondicionar sus escuelas.

En el caso específico del magisterio de Morelos, la gran mayoría están en contra en el regreso, la sección 19 del SNTE ya fijó su postura a través de su secretaria general “Gabriela Bañón Estrada, respondió que las condiciones para la presencia física de la comunidad escolar en los planteles no están dadas”.

Por otro lado, la expresión disidente “El poder de la educación y la sociedad” antes Nuevo Sindicalismo, manifestó que no es tiempo para el regreso a clases y evitar poner en riesgo a los alumnos, dicho por su representante Fernando Salgado Delgado, así mismo se manifestó el Movimiento Magisterial de Bases (MMB) de no retornar a laborar de forma presencial.

Las maestras y los maestros han estado laborando de forma no presencial haciendo su mayor esfuerzo para cumplir con su compromiso de educar a la niñez y juventud de México.