/ martes 15 de septiembre de 2020

Gajes electorales

En los momentos previos a temporadas de elección el ambiente político se suele enrarecer, la lucha por el poder contamina todo, incluso en estos momentos cruciales por los que atravesamos debido a una pandemia, intereses de partido o de grupo ahogan incluso un intento solidario para trabajar por un bien común.

Para Chihuahua se gesta una batalla político-electorera so pretexto de algo tan esencial como es el agua, los ingredientes están listos, un tratado que data de 1944, un gobierno federal obligado a cumplirlo, un estado agobiado por el estiaje, campesinos quienes se dicen despojados y un Gobernador dispuesto a iniciar su carrera proselitista y que no desperdiciará esta magnífica oportunidad.

En un problema por su propia naturaleza ya de difícil solución, diversos actores políticos ven la ocasión para llevar “agua pero a su molino”, así se van colgando en el vagón todos los “suspirantes” deseosos de una posición para los próximos comicios; en ese largo desfile además del mismo gobernador, está Gustavo Madero quien acostumbra tonos menos moderados que su tío abuelo y se destapa como defensor del sector agrícola, también hay alcaldes de Parral, Delicias y Chihuahua, sumados a la toma de la presa de “la boquilla” por parte de los campesinos afectados; agreguen la llegada de “Youtubers” e integrantes de “FRENA” y todos los que consideren puede atraer un beneficio del tipo que sea.

En la guerra de declaraciones y desmentidos, la Secretaría de Desarrollo Rural de Chihuahua y la Dirección Ejecutiva de la Junta Central de Aguas y Saneamiento Estatal afirmaron que durante el presente año, Chihuahua aportó 68% del agua que nuestro país ha pagado correspondiente al último lustro (no en todos los años llueve las mismas cantidades y los cortes son de manera quinquenal) por el tratado de aguas internacionales de nuestro país con Estados Unidos.

Luego hubo un comunicado conjunto de dependencias federales (Secretaría de Relaciones Exteriores, Comisión Nacional del Agua y la Comisión Internacional de Límites y Aguas) negando esa afirmación, pues según el gobierno federal de los 1786 millones de m3 del vital líquido que México ha aportado en el presente ciclo de entrega solo el 44% corresponden al río Conchos, ubicado en el norte del Estado, según el señalamiento de la cancillería, el afluente aún tiene un pendiente por entrega de 383.3 millones de m3 para cubrir el 54% de los 2158.6 millones que nuestro país debe cubrir cada 5 años a los Estados Unidos, afirmando, los ríos tributarios no han dejado de aportar agua y que es precisamente el río Conchos el de mayor atraso en su aporte, razón por la cual el tratado no se ha cumplido.

La CONAGUA exhortó a las autoridades estatales a no difundir información no apegada a la realidad y que pudiera confundir a la población, pero la solicitud llegó tarde, la población está confundida y dividida, la disyuntiva entre el necesario y urgente apoyo al campo mexicano y la importancia de cumplir con un tratado bilateral de donde por cierto México saca la mejor parte, resulta tierra fértil para políticos hagan en búsqueda de dividir a la opinión pública y enturbiar los verdaderos intereses del pueblo, hay quien ve la expulsión de la Guardia Nacional encargada de resguardar la presa “la boquilla” como una afrenta a las instituciones y existe quien lo ve como un triunfo sobre el autoritarismo, la visión depende de los intereses políticos en juego.

Lo cierto es que en el mar de la guerra mediática entre gobierno federal y gobernadores mayoritariamente panistas, quien pierde es el interés común y el ocultamiento de la verdad se encuentra entre los daños colaterales, es el inicio anticipado como siempre de la carrera electorera y todos son gajes de ese oficio.


@michelleonofre

En los momentos previos a temporadas de elección el ambiente político se suele enrarecer, la lucha por el poder contamina todo, incluso en estos momentos cruciales por los que atravesamos debido a una pandemia, intereses de partido o de grupo ahogan incluso un intento solidario para trabajar por un bien común.

Para Chihuahua se gesta una batalla político-electorera so pretexto de algo tan esencial como es el agua, los ingredientes están listos, un tratado que data de 1944, un gobierno federal obligado a cumplirlo, un estado agobiado por el estiaje, campesinos quienes se dicen despojados y un Gobernador dispuesto a iniciar su carrera proselitista y que no desperdiciará esta magnífica oportunidad.

En un problema por su propia naturaleza ya de difícil solución, diversos actores políticos ven la ocasión para llevar “agua pero a su molino”, así se van colgando en el vagón todos los “suspirantes” deseosos de una posición para los próximos comicios; en ese largo desfile además del mismo gobernador, está Gustavo Madero quien acostumbra tonos menos moderados que su tío abuelo y se destapa como defensor del sector agrícola, también hay alcaldes de Parral, Delicias y Chihuahua, sumados a la toma de la presa de “la boquilla” por parte de los campesinos afectados; agreguen la llegada de “Youtubers” e integrantes de “FRENA” y todos los que consideren puede atraer un beneficio del tipo que sea.

En la guerra de declaraciones y desmentidos, la Secretaría de Desarrollo Rural de Chihuahua y la Dirección Ejecutiva de la Junta Central de Aguas y Saneamiento Estatal afirmaron que durante el presente año, Chihuahua aportó 68% del agua que nuestro país ha pagado correspondiente al último lustro (no en todos los años llueve las mismas cantidades y los cortes son de manera quinquenal) por el tratado de aguas internacionales de nuestro país con Estados Unidos.

Luego hubo un comunicado conjunto de dependencias federales (Secretaría de Relaciones Exteriores, Comisión Nacional del Agua y la Comisión Internacional de Límites y Aguas) negando esa afirmación, pues según el gobierno federal de los 1786 millones de m3 del vital líquido que México ha aportado en el presente ciclo de entrega solo el 44% corresponden al río Conchos, ubicado en el norte del Estado, según el señalamiento de la cancillería, el afluente aún tiene un pendiente por entrega de 383.3 millones de m3 para cubrir el 54% de los 2158.6 millones que nuestro país debe cubrir cada 5 años a los Estados Unidos, afirmando, los ríos tributarios no han dejado de aportar agua y que es precisamente el río Conchos el de mayor atraso en su aporte, razón por la cual el tratado no se ha cumplido.

La CONAGUA exhortó a las autoridades estatales a no difundir información no apegada a la realidad y que pudiera confundir a la población, pero la solicitud llegó tarde, la población está confundida y dividida, la disyuntiva entre el necesario y urgente apoyo al campo mexicano y la importancia de cumplir con un tratado bilateral de donde por cierto México saca la mejor parte, resulta tierra fértil para políticos hagan en búsqueda de dividir a la opinión pública y enturbiar los verdaderos intereses del pueblo, hay quien ve la expulsión de la Guardia Nacional encargada de resguardar la presa “la boquilla” como una afrenta a las instituciones y existe quien lo ve como un triunfo sobre el autoritarismo, la visión depende de los intereses políticos en juego.

Lo cierto es que en el mar de la guerra mediática entre gobierno federal y gobernadores mayoritariamente panistas, quien pierde es el interés común y el ocultamiento de la verdad se encuentra entre los daños colaterales, es el inicio anticipado como siempre de la carrera electorera y todos son gajes de ese oficio.


@michelleonofre