/ sábado 22 de agosto de 2020

La calidad del agua potable

La semana pasada comentamos la publicación de datos muy reveladores sobre la calidad del agua que llega a las escuelas de nuestro país.

Según lo publicado por el portal de noticias SinEmbargo, el agua entubada que llega a las escuelas de 28 estados del país contiene coliformes fecales, pero además contiene contaminantes como arsénico, fluoruros, manganeso, nitritos o plomo, lo cual puede causar enfermedades gastrointestinales como diarreas o cólera, cáncer, enfermedades cardiovasculares, debilitamiento del sistema inmunológico y afectaciones en el desarrollo infantil, entre otras cosas.

Cántaro Azul , A.C., obtuvo a través de solicitudes de transparencia los resultados de más de 27 mil análisis de calidad del agua que se hicieron en escuelas de todo el país.

“En todos los estados hay algún tipo de contaminación. El fluoruro y arsénico es más prevalente en los estados del centro y norte, y los coliformes fecales se encontraron en 598 municipios de 28 estados, entre ellos, Michoacán, Chiapas, Guerrero, Puebla, Veracruz y Tlaxcala”, afirmó Fermín Reygadas Robles Gil, director de Cántaro Azul.

Los dictámenes se llevaron a cabo por laboratorios acreditados para analizar la NOM- 127 de la Secretaría de Salud sobre la calidad del agua potable. La muestra no consideró las escuelas que carecen del servicio de agua y monitoreo casi 20 elementos de los mas de 40 establecidos en la norma.

Con base en el dictamen, se determinó si se podían instalar los bebederos para filtrar los contaminantes. En muchas de las escuelas donde se encontraron arsénico y fluoruros no se instalaron bebederos porque no tenían capacidad para remover estos contaminantes.

Sin duda, es un tema que debería preocuparnos a todos, no se puede permitir que se siga distribuyendo agua de esta calidad, hay un entramado institucional que debe mejorar su funcionamiento:

Primero, los municipios tienen a su cargo los servicios públicos de agua potable de acuerdo con lo establecido en el artículo 115 constitucional, y son los responsables directos de cumplir con los límites establecidos en la Norma Oficial Mexicana correspondiente (NOM-127-SSA1-2000).

Segundo, la Secretaría de Salud tiene la responsabilidad general de vigilar la calidad del agua potable, y está obligada a fijar los niveles de calidad que deben cumplir los proveedores de esos servicios (a través de la NOM ya mencionada, de la que, por cierto, está en proceso de consulta un Proyecto de Modificación).

Tercero, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) es un órgano regulador descentralizado de la Secretaría de Salud, con facultades desconcentradas en los estados y la CDMX, y es la responsable de verificar la calidad del agua potable, esta verificación debe ser más estricta, hacerse pública y generar acciones.

Finalmente, aunque la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) interviene más bien en la vigilancia de la calidad del agua en las fuentes superficiales o subterráneas, y no de la calidad del agua potable que distribuyen los municipios a la población, si implementa junto con las Comisiones Estatales del Agua el Programa Agua Limpia, que tiene como objetivo ampliar la cobertura de desinfección del agua para consumo humano; a través de la instalación, rehabilitación y mantenimiento de dosificadores; el suministro y distribución eficiente de desinfectantes, así como la capacitación y adiestramiento de operadores. Podría ampliar los alcances de este programa nacido en 1991.

Aunque estos esfuerzos han permitido avances, los resultados están lejos de ser óptimos, el costo social de no contar con agua potable en nuestras casas y escuelas es muy alto. Necesitamos avanzar en ese tema. #aguaparatodos.

La semana pasada comentamos la publicación de datos muy reveladores sobre la calidad del agua que llega a las escuelas de nuestro país.

Según lo publicado por el portal de noticias SinEmbargo, el agua entubada que llega a las escuelas de 28 estados del país contiene coliformes fecales, pero además contiene contaminantes como arsénico, fluoruros, manganeso, nitritos o plomo, lo cual puede causar enfermedades gastrointestinales como diarreas o cólera, cáncer, enfermedades cardiovasculares, debilitamiento del sistema inmunológico y afectaciones en el desarrollo infantil, entre otras cosas.

Cántaro Azul , A.C., obtuvo a través de solicitudes de transparencia los resultados de más de 27 mil análisis de calidad del agua que se hicieron en escuelas de todo el país.

“En todos los estados hay algún tipo de contaminación. El fluoruro y arsénico es más prevalente en los estados del centro y norte, y los coliformes fecales se encontraron en 598 municipios de 28 estados, entre ellos, Michoacán, Chiapas, Guerrero, Puebla, Veracruz y Tlaxcala”, afirmó Fermín Reygadas Robles Gil, director de Cántaro Azul.

Los dictámenes se llevaron a cabo por laboratorios acreditados para analizar la NOM- 127 de la Secretaría de Salud sobre la calidad del agua potable. La muestra no consideró las escuelas que carecen del servicio de agua y monitoreo casi 20 elementos de los mas de 40 establecidos en la norma.

Con base en el dictamen, se determinó si se podían instalar los bebederos para filtrar los contaminantes. En muchas de las escuelas donde se encontraron arsénico y fluoruros no se instalaron bebederos porque no tenían capacidad para remover estos contaminantes.

Sin duda, es un tema que debería preocuparnos a todos, no se puede permitir que se siga distribuyendo agua de esta calidad, hay un entramado institucional que debe mejorar su funcionamiento:

Primero, los municipios tienen a su cargo los servicios públicos de agua potable de acuerdo con lo establecido en el artículo 115 constitucional, y son los responsables directos de cumplir con los límites establecidos en la Norma Oficial Mexicana correspondiente (NOM-127-SSA1-2000).

Segundo, la Secretaría de Salud tiene la responsabilidad general de vigilar la calidad del agua potable, y está obligada a fijar los niveles de calidad que deben cumplir los proveedores de esos servicios (a través de la NOM ya mencionada, de la que, por cierto, está en proceso de consulta un Proyecto de Modificación).

Tercero, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) es un órgano regulador descentralizado de la Secretaría de Salud, con facultades desconcentradas en los estados y la CDMX, y es la responsable de verificar la calidad del agua potable, esta verificación debe ser más estricta, hacerse pública y generar acciones.

Finalmente, aunque la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) interviene más bien en la vigilancia de la calidad del agua en las fuentes superficiales o subterráneas, y no de la calidad del agua potable que distribuyen los municipios a la población, si implementa junto con las Comisiones Estatales del Agua el Programa Agua Limpia, que tiene como objetivo ampliar la cobertura de desinfección del agua para consumo humano; a través de la instalación, rehabilitación y mantenimiento de dosificadores; el suministro y distribución eficiente de desinfectantes, así como la capacitación y adiestramiento de operadores. Podría ampliar los alcances de este programa nacido en 1991.

Aunque estos esfuerzos han permitido avances, los resultados están lejos de ser óptimos, el costo social de no contar con agua potable en nuestras casas y escuelas es muy alto. Necesitamos avanzar en ese tema. #aguaparatodos.