De acuerdo con el Secretario Ejecutivo del Coneval, Gozálo Hernandez Licona, dentro de algunas semanas se publicará el Informe de Evaluación de la Política Social en México 2018.
A través de este diagnóstico, Coneval examinará las acciones de política pública realizadas a nivel federal y estatal, así como los principales resultados en los indicadores de pobreza multidimensional. En el informe de 2016, dicha insitución consideró que la coordinación interinstitucional (horizontal y vertical) era una de las principales tareas por mejorar.
Ante la multiplicidad de programas y recursos dirigidos a rubros sociales, el intercambio de información para llevar a cabo una intervención integral es crucial. En este sentido, existen varios esfuerzos por mejorar prácticas, procesos y mecanismos de coordinación, compartición y retroalimentación ágil de la información.
La trascendencia de ello no es propiamente alcanzar la eficiencia administrativa u operativa de los recursos de los programas, aunque por sí mismo sería muy valioso lograrlo. Lo que realmente resulta fundamental, es el poder atender las necesidades de las personas vulnerables y permitirles un ejercicio pleno de los derechos sociales de manera oportuna.
Sin duda, para incidir en las casusas estructurales de la pobreza y la desigualdad resulta necesario cuestionar el modelo de intervención pública y el entramado institucional actual. El modelo de economía actual no está diseñado para funcionar en beneficio de la mayoría ni para aliviar las condiciones de pobreza de manera oportuna.
Desde que Coneval ha comenzado a medir la pobreza y su evolución desde un enfoque multidimensional, por supuesto que mucho de los indicadores y la incidencia pública ha mejorado.
En estos procesos, se han desarrollado mecanismo de coordinación interinstitucionales; estrategias de intervención territorial social; mayor información y mejoras sustantivas en la toma de decisiones para dirigir y aplicar eficientemente los recursos; así como buenas prácticas de monitoreo y evaluación; transparencia y canales para incentivas la participación social.
A pesar de todos estos esfuerzos, los índices de pobreza se mantienen alarmantemente altos. De ahí la consideración de analizar y discutir un nuevo enfoque institucional que permita implementar un marco teórico y un nuevo diseño institucional que reduzca disparidades y que viabilice sociedades justas, de economías igualitarias.
Para ello, se debe centrar la discusión propuestas que permitan mejorar las oportunidades educativas, el ingreso laboral, así como incorporar nuevas políticas universales, impositivas y que permitan una mejor redistribución del ingreso. Es decir, enfocarnos en las causas de la desigualdad a fin de poner en marcha instrumentos generalizadores del Estado que permitiría reducirla y a partir de ello, atacar la pobreza y la excesiva concentración de la riqueza.
La publicación del Coneval será un documento de referencia obligada para los próximos tomadores de decisiones en materia de políticas públicas. En Morelos, la discusión debería comenzar a promoverse, ya que muchos temas cotidianos podrían resolverse desde lo social.
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