Las leyes electorales, son una norma de derecho de caricatura. Quienes las elaboraron presuntamente son juristas, expertos en derecho electoral; probablemente lo sean; pero las leyes que rigen las precampañas, las campañas, las instalaciones de las casillas, los recursos económicos, materiales, humanos, y la verificación de éstos, todo es simulado. Somos el país que tenemos el dispendio mayor en el mundo para elegir un Presidente de la República. Destinamos billones de pesos para que la simulación sea más completa; y desafortunadamente como quien esto escribe, estamos conscientes de esa farsa electoral; sabemos que los votos se compran y que los votantes se venden; tenemos precisa la idea de que todos los partidos políticos nacionales son paradigma, íconos de la simulación electoral.
Juzguen ustedes distinguidos lectores que me honran leyendo este espacio, si no los mueve a reflexionar lo que les estamos relatando. No puede haber una muestra más completa y palpable de la simulación electoral, que las aberraciones de lo que llaman coaliciones de gobierno, acuerdos electorales, el calificativo que se le quiera poner; la realidad es que todos los partidos simulan sus principios, sus plataformas, sus objetivos, lo que quieren alcanzar; de otra manera no se explica que estemos viendo juntas las supuestas ideologías de derecha y extrema derecha que representa Acción Nacional; lo que hoy es un remedo del pasado; cuando se habló de una revolución institucional; y ahora de finales del siglo pasado, cuando surgió el partido de la revolución democrática, parecía que iban por buen camino, pero ya lo vimos que se han quedado hechos añicos, considerando que el PRD no tiene ni la sombra de lo que fue Cárdenas y Muñoz Ledo, también obedeciendo a sus intereses personales, de no haber sido en su momento candidatos de lo que aspiraban en el PRI, se fueron por la puerta falsa y crearon el PRD, que más o menos iba ahí; hace más de veinte años gobierna la Ciudad de México; pero hoy las simulaciones totales de revolucionarios democráticos, no les queda más que los nombres, porque las tribus, los grupos, siempre caracterizados por intereses personales, nuevamente los anteponen a cualquier interés de México y ahí están unidos Acción Nacional y PRD, a éstos les hace tercera otro partido creado por expriistas, con propósitos tan simulados que es evidente que al encontrar eco en la extrema derecha y lo que había de izquierda, el Movimiento Ciudadano, hoy ha quedado como jamón del sándwich en medio del PAN y el PRD; siempre con el mismo propósito, recoger unas migajas, que se les dé una posición en el momento que se defina el resultado, con el único propósito tanto el PAN, PRD Y MV de recibir más recursos para seguir haciendo el gran negocio de la política.
TRILOGÍAS SIMULADAS Lo mismo está ocurriendo con el partido Revolucionario Institucional, sigue aliado con su eterna cumparsa que es el verde ecologista, atrás de todo esto, está el niño verde, pero nuevamente sus ideologías no existen, son tan dispares que es necesario caer otra vez a la simulación para obtener canonjías. Lo grave es que el partido denominado Nueva Alianza creado por la Gordillo, se alió con el PRI y con el Verde, y sin embargo los parientes de esta señora se han ido al partido de la Regeneración Nacional, porque también simulando, quieren seguir succionando la ubre oficial, no importa de qué color o de donde sea la situación; ésta es la segunda terna; la tercera está integrada por Regeneración Nacional; el partido del Trabajo y el famoso PES, ése que según los corrillos políticos fue creado en su momento como paracaídas por Osorio y los resultados están a la vista; también MORENA, el PT y el PES están en la simulación tan grave, que MORENA les ha abierto las puertas del que quiera ir ahí, con el único propósito de que haya votos y ganar la Presidencia; la ideología de MORENA está tan desdibujada y tan opaca, que la simulación que recientemente ha expresado su permanente candidato, de menospreciar al ejército; calificar de “leguleyos” a los honorables Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación; y pretender darle para atrás a la reforma educativa y entregarle la Secretaria de Educación Pública a la CNTE; o también pensamos que sea otra simulación decir que se pararía la construcción del aeropuerto internacional de la Ciudad de México, que sería un desastre gravísimo; pero nuevamente la simulación está presente; y ratificamos que es lo mismo con esta otro tercia.
LEYES ABSURDAS Las leyes electorales mexicanas, son el marco de referencia del desorden y la crisis en que los partidos políticos y los políticos han metido al país. La constante continúa. La simulación absoluta o parcial está presente. Las leyes hechas a modo, no sancionan, no hay instrumentos y nuevamente como lo acabamos de ver, ya se creó una jurisprudencia, a modo también para las hipótesis de nulidad de las elecciones; que en su momento tendremos que ver hasta dónde va a llegar ésto. También es una simulación y desafortunadamente una gran mayoría de los mexicanos estamos participando activa o pasivamente en esa simulación; cuando no protestamos, nos hacemos cómplices, buscando alguna posición o algún beneficio personal.
TODO ES SIMULADO Los partidos políticos simulan que trabajan, que están en precampañas y es todo lo contrario; hemos visto que están en plena campañas; y que ahora en estos 45 días de veda electoral, siguen haciendo también campañas de otra manera, porque se están realizando actos en auditorios cerrados, se sigue haciendo política, se siguen haciendo promesas y desgraciadamente la simulación sigue siendo el pan nuestro de cada día para los mexicanos y para los partidos.
LOS ELECTORES TAMBIÉN SIMULADOS Desafortunadamente y en ellos me incluyo como autor de este espacio, los mexicanos también simulamos que estamos con tal o cual candidato y en realidad no es así. Parafraseando a Agustín Lara, se conviertan en los corrillos políticos; “Vende caro tu amor aventurera”; incluso ustedes recordarán que hace seis años algún candidato le aconsejaba al pueblo “Cojan los que les dan, aunque sea un puerquito, o lo que les lleven, una despensa, una tarjeta para cobrar un dinero, guárdenselo y después voten por quien quieran”; esto también es simulación y desgraciadamente si todos nos vamos en esta línea, cuando éstos lleguen, los que aspiran al puesto, ¿qué van hacer?, a simular que son presidentes; los legisladores a simular que legislan, la policía a simular que hacen sus funciones. Finalmente quienes lleguen al poder, simulan que están a favor de México; pero en realidad, están “llevando agua a su molino”; ponen por encima del país su interés personal y díganme ustedes si no, como dijo en su momento, Hank González: “un político pobre es un pobre político”; y que decir de un pueblo que se compone de 122 millones de habitantes; que entre números y porcentajes se dice que la mitad, que la tercera parte están en extrema pobreza, etc.; pero frente a esto, no es una simulación, es una realidad, que entre los mexicanos tenemos al hombre más rico del mundo.
CONCLUSIÓN Debemos reflexionar por quién votar. Exigir que cumplan con lo que prometen. No permitir la simulación y no ser parte de ella; nuestros hijos nos lo agradecerán el día de mañana. Usted distinguido lector que me honra leyendo estas líneas cada semana, haga el mismo esfuerzo que quien esto escribe, no simulemos, votemos por el que mejor creamos que nos puede satisfacer en cuanto a los intereses del país y logros personales.
/JACINTO HERNÁNDEZ LUCAS Director de la Programación Digital de la Revista de Derecho Familiar “Pater Familias” de la UNAM. jhernandez366@hotmail.com
