/ martes 31 de marzo de 2020

La última oportunidad

El mensaje “quédate en casa” en absoluta preocupación, coincide con semblante desencajado de Hugo López Gatell.

El rumbo que la pandemia tomará en nuestro país dependerá de lo hecho en estos días, la campaña de sana distancia con un confinamiento domiciliario voluntario dará sus frutos o fallará según sea el caso y la seriedad de todas y todos.

Hay acciones que han tomado también los gobiernos estatales y los ayuntamientos, en Puebla se anunciaron sanciones de cárcel y una multa entre los 1737 y 86,880 pesos, esto a quién haya resultado positivo en un examen de detección de COVID-19 y sabiéndose portadores del virus no cumplan con las disposiciones para evitar el contagio o peor aún, lo diseminen a propósito.

Aunque no faltará quien se escude en las irresponsables declaraciones del propio Gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta al afirmar que sólo a la gente rica le dan estas enfermedades y los pobres gozan de inmunidad.

Independiente de las revisiones de acciones y su apego a la Constitución, o de lo cerca que estemos de una suspensión de derechos, la solidaridad debería dejarnos en casa con independencia de la existencia de medidas coercitivas.

Existen más acciones a mencionar en las que se percibe cierta incongruencia o al menos desorganización inexplicable, los ayuntamientos de varios municipios en Morelos han emitido medidas restrictivas a todos los comercios, sin embargo ellos mantienen varias oficinas abiertas al día de hoy, pocos extendieron los plazos para el cumplimiento de obligaciones de la ciudadanía y esa incongruencia es percibida por los propietarios de bares y otros negocios.

En otras acciones, según la comunicación de BBVA, Banorte, Santander y HSBC otorgarán prórrogas hasta de 4 meses sin intereses para el pago de créditos otorgados, todo esto mientras las demás instituciones bancarias guardan silencio.

La preocupación del Subsecretario de Salud se entiende cuando a nivel mundial el panorama se torna oscuro, el 29 de Febrero se conocería el caso del primer ciudadano estadunidense muerto por coronavirus en territorio norteamericano, a 30 días de ese hecho, 2500 personas habrían perdido la vida por la misma causa en el vecino país del norte, casi la mitad de ellas en el Estado de New York, del total de personas fallecidas en los Estados Unidos, 776 fallecieron en las últimas 24 horas, esto da una idea de lo que se aproxima, Donald Trump ha cambiado su discurso en donde invitaba a la población a volver al trabajo y extendió el plazo para salir de las casas hasta el 30 de Abril.

Al presidente que comparó la pandemia con la gripe desestimando la necesidad de reducir actividades y mintió sobre la cantidad de pruebas de detección disponibles, la realidad le estalló en las manos con más de 150,000 contagios; Estados Unidos es el nuevo epicentro de la pandemia.

En México el mensaje ha sido claro desde hace varios días, “Quédate en casa” reiteradamente recomienda el subsecretario López Gattel, medida complicada que afectará económica y hasta psicológicamente a la población pero por librar literalmente el infierno vale la pena cualquier sacrificio.

Sin embargo no en todos los mexicanos ha permeado el mensaje, en Acapulco se siguen registrando afluencias importantes de turismos, el puerto tiene 9 personas que han sido diagnosticadas con el nuevo virus pero eso parece no importar, aunque la ocupación hotelera ha disminuido, los vacacionistas llegan rentando “casas finsemaneras” abarrotando playas.

La etapa de un crecimiento exponencial acelerado está cerca, las autoridades lo ha repetido hasta el cansancio y en las calles aunque con actividad disminuida aún no se refleja lo que uno espera dada la información diaria desde los países más afectados.

Hay información irresponsable circulando en redes, la información oficial es fundamental en estos casos y esa es la que debemos permitir que entre en nuestros hogares.

Absolutamente todos los sistemas de salud en el mundo han sido rebasados por una pandemia que aún no alcanza su punto más alto, la tasa de transmisión del virus es muy rápida y desnuda un escenario para nuestro país.

La tormenta se avecina y de todos nosotros depende aminorar el impacto y pasar más rápidamente la crisis, al momento de escribir esta nota se esperaba un importante mensaje del Consejo de Salubridad General, sin duda las acciones se harán más contundentes, pero la estrategia más eficaz es personal.

Este es el momento donde el amor que nos une a nuestros familiares y amigos nos invita a separarnos, seamos solidarios, vamos a quedarnos en casa, esta es nuestra última oportunidad.

El mensaje “quédate en casa” en absoluta preocupación, coincide con semblante desencajado de Hugo López Gatell.

El rumbo que la pandemia tomará en nuestro país dependerá de lo hecho en estos días, la campaña de sana distancia con un confinamiento domiciliario voluntario dará sus frutos o fallará según sea el caso y la seriedad de todas y todos.

Hay acciones que han tomado también los gobiernos estatales y los ayuntamientos, en Puebla se anunciaron sanciones de cárcel y una multa entre los 1737 y 86,880 pesos, esto a quién haya resultado positivo en un examen de detección de COVID-19 y sabiéndose portadores del virus no cumplan con las disposiciones para evitar el contagio o peor aún, lo diseminen a propósito.

Aunque no faltará quien se escude en las irresponsables declaraciones del propio Gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta al afirmar que sólo a la gente rica le dan estas enfermedades y los pobres gozan de inmunidad.

Independiente de las revisiones de acciones y su apego a la Constitución, o de lo cerca que estemos de una suspensión de derechos, la solidaridad debería dejarnos en casa con independencia de la existencia de medidas coercitivas.

Existen más acciones a mencionar en las que se percibe cierta incongruencia o al menos desorganización inexplicable, los ayuntamientos de varios municipios en Morelos han emitido medidas restrictivas a todos los comercios, sin embargo ellos mantienen varias oficinas abiertas al día de hoy, pocos extendieron los plazos para el cumplimiento de obligaciones de la ciudadanía y esa incongruencia es percibida por los propietarios de bares y otros negocios.

En otras acciones, según la comunicación de BBVA, Banorte, Santander y HSBC otorgarán prórrogas hasta de 4 meses sin intereses para el pago de créditos otorgados, todo esto mientras las demás instituciones bancarias guardan silencio.

La preocupación del Subsecretario de Salud se entiende cuando a nivel mundial el panorama se torna oscuro, el 29 de Febrero se conocería el caso del primer ciudadano estadunidense muerto por coronavirus en territorio norteamericano, a 30 días de ese hecho, 2500 personas habrían perdido la vida por la misma causa en el vecino país del norte, casi la mitad de ellas en el Estado de New York, del total de personas fallecidas en los Estados Unidos, 776 fallecieron en las últimas 24 horas, esto da una idea de lo que se aproxima, Donald Trump ha cambiado su discurso en donde invitaba a la población a volver al trabajo y extendió el plazo para salir de las casas hasta el 30 de Abril.

Al presidente que comparó la pandemia con la gripe desestimando la necesidad de reducir actividades y mintió sobre la cantidad de pruebas de detección disponibles, la realidad le estalló en las manos con más de 150,000 contagios; Estados Unidos es el nuevo epicentro de la pandemia.

En México el mensaje ha sido claro desde hace varios días, “Quédate en casa” reiteradamente recomienda el subsecretario López Gattel, medida complicada que afectará económica y hasta psicológicamente a la población pero por librar literalmente el infierno vale la pena cualquier sacrificio.

Sin embargo no en todos los mexicanos ha permeado el mensaje, en Acapulco se siguen registrando afluencias importantes de turismos, el puerto tiene 9 personas que han sido diagnosticadas con el nuevo virus pero eso parece no importar, aunque la ocupación hotelera ha disminuido, los vacacionistas llegan rentando “casas finsemaneras” abarrotando playas.

La etapa de un crecimiento exponencial acelerado está cerca, las autoridades lo ha repetido hasta el cansancio y en las calles aunque con actividad disminuida aún no se refleja lo que uno espera dada la información diaria desde los países más afectados.

Hay información irresponsable circulando en redes, la información oficial es fundamental en estos casos y esa es la que debemos permitir que entre en nuestros hogares.

Absolutamente todos los sistemas de salud en el mundo han sido rebasados por una pandemia que aún no alcanza su punto más alto, la tasa de transmisión del virus es muy rápida y desnuda un escenario para nuestro país.

La tormenta se avecina y de todos nosotros depende aminorar el impacto y pasar más rápidamente la crisis, al momento de escribir esta nota se esperaba un importante mensaje del Consejo de Salubridad General, sin duda las acciones se harán más contundentes, pero la estrategia más eficaz es personal.

Este es el momento donde el amor que nos une a nuestros familiares y amigos nos invita a separarnos, seamos solidarios, vamos a quedarnos en casa, esta es nuestra última oportunidad.