/ sábado 20 de noviembre de 2021

Las mejores prácticas en el cobro-pago de agua (II)

En 2020 México fue el principal consumidor de agua embotellada en el mundo, pese a que le cuesta 108 veces más de lo que paga a los organismos operadores de agua municipales.

Eso revela la Consultora Euromonitor en un estudio publicado por la Asociación Nacional de Entidades de Agua y Saneamiento en México, A.C. (ANEAS).

¿Por qué la gente se niega a pagar por un servicio tan vital como es el agua potable? ¿Por qué la gente si paga la luz a la CFE y no quiere pagar por el agua? ¿Por qué esta dispuesta a pagar mucho más por un refresco, por una cerveza, o por el agua embotellada, que por el agua que le llega a su hogar? ¿No sería mejor pagar una cuota justa al organismo operador municipal? Son preguntas que nos hacemos todo aquellos que trabajamos en este sector tan importante pero tan poco valorado.

Como lo comenté en mi columna pasada, el miércoles 17 de noviembre, la Fundación Gonzalo Río Arronte I.A.P. realizó la entrega de los reconocimientos a las mejores prácticas en el cobro-pago de agua 2021 a los organismos operadores del país. Esta fue la 9ª entrega de estos reconocimientos, es un esfuerzo que ha realizado la fundación desde hace casi una década. Es algo que hay que reconocerle.

Los servicios de agua potable, alcantarillado y saneamiento en nuestro país han venido mejorando en cobertura, pero no en calidad ni en continuidad. Es decir, cada vez más población tiene un tubo que podría llevar agua hasta su casa, pero el agua no le llega de manera continua ni con la calidad adecuada.

Muchos de nosotros crecimos tomando agua de la llave, era común salir a jugar y regresar a abrir la llave para saciar nuestra sed, hoy día, según datos del INEGI (Módulo de Hogares y Medio Ambiente -MOHOMA 2017-), el 76% de la población en México compra agua embotellada para beber, principalmente porque no confía en la calidad del agua que recibe por la red y teme enfermarse (o ya se ha enfermado).

Este deterioro en la calidad del servicio se ha venido agravando con los años por la cada vez menor capacidad operativa de los organismos operadores de agua. Entre otras cosas por la escasa recaudación que pueden realizar. Sus ingresos no son suficientes para pagar la operación cotidiana ni para darle mantenimiento adecuado a los equipos y a la infraestructura que ya existe, batallan para pagar el recibo de la CFE, sufren para pagar la nómina del personal. De ahí la importancia de este esfuerzo que realiza esta Fundación.

La Fundación Gonzalo Río Arronte es una Institución de Asistencia Privada fundada en el año 2000, sin fines de lucro y sin filiación de partido político o religión. La Fundación nació gracias a la generosidad de don Gonzalo Río Arronte, un empresario poblano que surgió de la cultura del esfuerzo e hizo su fortuna en la industria de los dulces inicialmente. En 1993, ordenó mediante testamento público abierto, crear la institución que hoy lleva su nombre, a partir de su legado, para ayudar en tres temas en específico: salud, adicciones y agua.

El reconocimiento forma parte de su Programa Agua, y tiene por objeto fomentar la conservación del agua y mejorar su gestión. El sistema que se utiliza para evaluar a los organismos es el Programa de Indicadores de Gestión de Organismos Operadores (PIGOO) y está a cargo del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA).

Entre los ganadores estuvieron Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey (SADM) y el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de León (SAPAL), pero también obtuvieron premios en otras categorías algunos organismos muy pequeños como Santa María del Tule y Santa Cruz Amilpas en Oaxaca, Quiroga en Michoacán, Apaseo el Grande en Guanajuato, Tecate y Mexicali en Baja California y Tapachula en Chiapas. Puedes ver el video de la premiación en https://fundaciongonzalorioarronte.org/


En 2020 México fue el principal consumidor de agua embotellada en el mundo, pese a que le cuesta 108 veces más de lo que paga a los organismos operadores de agua municipales.

Eso revela la Consultora Euromonitor en un estudio publicado por la Asociación Nacional de Entidades de Agua y Saneamiento en México, A.C. (ANEAS).

¿Por qué la gente se niega a pagar por un servicio tan vital como es el agua potable? ¿Por qué la gente si paga la luz a la CFE y no quiere pagar por el agua? ¿Por qué esta dispuesta a pagar mucho más por un refresco, por una cerveza, o por el agua embotellada, que por el agua que le llega a su hogar? ¿No sería mejor pagar una cuota justa al organismo operador municipal? Son preguntas que nos hacemos todo aquellos que trabajamos en este sector tan importante pero tan poco valorado.

Como lo comenté en mi columna pasada, el miércoles 17 de noviembre, la Fundación Gonzalo Río Arronte I.A.P. realizó la entrega de los reconocimientos a las mejores prácticas en el cobro-pago de agua 2021 a los organismos operadores del país. Esta fue la 9ª entrega de estos reconocimientos, es un esfuerzo que ha realizado la fundación desde hace casi una década. Es algo que hay que reconocerle.

Los servicios de agua potable, alcantarillado y saneamiento en nuestro país han venido mejorando en cobertura, pero no en calidad ni en continuidad. Es decir, cada vez más población tiene un tubo que podría llevar agua hasta su casa, pero el agua no le llega de manera continua ni con la calidad adecuada.

Muchos de nosotros crecimos tomando agua de la llave, era común salir a jugar y regresar a abrir la llave para saciar nuestra sed, hoy día, según datos del INEGI (Módulo de Hogares y Medio Ambiente -MOHOMA 2017-), el 76% de la población en México compra agua embotellada para beber, principalmente porque no confía en la calidad del agua que recibe por la red y teme enfermarse (o ya se ha enfermado).

Este deterioro en la calidad del servicio se ha venido agravando con los años por la cada vez menor capacidad operativa de los organismos operadores de agua. Entre otras cosas por la escasa recaudación que pueden realizar. Sus ingresos no son suficientes para pagar la operación cotidiana ni para darle mantenimiento adecuado a los equipos y a la infraestructura que ya existe, batallan para pagar el recibo de la CFE, sufren para pagar la nómina del personal. De ahí la importancia de este esfuerzo que realiza esta Fundación.

La Fundación Gonzalo Río Arronte es una Institución de Asistencia Privada fundada en el año 2000, sin fines de lucro y sin filiación de partido político o religión. La Fundación nació gracias a la generosidad de don Gonzalo Río Arronte, un empresario poblano que surgió de la cultura del esfuerzo e hizo su fortuna en la industria de los dulces inicialmente. En 1993, ordenó mediante testamento público abierto, crear la institución que hoy lleva su nombre, a partir de su legado, para ayudar en tres temas en específico: salud, adicciones y agua.

El reconocimiento forma parte de su Programa Agua, y tiene por objeto fomentar la conservación del agua y mejorar su gestión. El sistema que se utiliza para evaluar a los organismos es el Programa de Indicadores de Gestión de Organismos Operadores (PIGOO) y está a cargo del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA).

Entre los ganadores estuvieron Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey (SADM) y el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de León (SAPAL), pero también obtuvieron premios en otras categorías algunos organismos muy pequeños como Santa María del Tule y Santa Cruz Amilpas en Oaxaca, Quiroga en Michoacán, Apaseo el Grande en Guanajuato, Tecate y Mexicali en Baja California y Tapachula en Chiapas. Puedes ver el video de la premiación en https://fundaciongonzalorioarronte.org/