/ sábado 28 de julio de 2018

Prospectiva del fracaso del PRI

INTERROGANTES

¿Qué es y qué significa la palabra prospectiva? ¿2012 al 2018 se cavó la tumba del PRI? ¿Hechos innegables de su fracaso? ¿Cómo era en el pasado; como es en el presente y cuál es el futuro del PRI? ¿En las recientes elecciones los mexicanos votaron contra el PRI o a favor de López Obrador?

¿QUÉ ES Y QUÉ SIGNIFICA LA PALABRA PROSPECTIVA?

Esta palabra deriva de del latín prospectīvus que significa ver hacia el futuro, como técnica sirve para hacer diagnósticos de alguna institución, en este caso lo vamos hacer con el PRI, de cómo era en el pasado, su situación actual y cuál puede ser su futuro. La prospectiva de este partido es de desahucio, no se puede hablar ni siquiera de refundación, porque mientras no acepten los graves errores que cometieron en el pasado, sobre todo cuando deja de ser partido hegemónico y tiene que luchar democráticamente entre otros, como ocurrió con el alto vacío y también con el que le siguió los pasos, desafortunadamente esta es mi opinión personal; y vamos a analizar en este artículo los seis últimos años del PRI para encontrar que hay no sólo un culpable -Peña Nieto- sino quienes lo acompañaron y que con sus hechos, con sus actos, con sus malas conductas han desfondado y han provocado el descanso eterno del PRI. A mis distinguidos lectores les recomiendo en última instancia ver esta palabra en el diccionario que es muy importante, porque es la base y esencia de este artículo.

¿2012 AL 2018 SE CAVÓ LA TUMBA DEL PRI?

Categóricamente afirmamos que sí. El capital político que tuvo el actual Presidente en el año 2012 se fue dilapidando, se fue terminando, se fue tirando a la basura porque evidentemente en el momento que fue electo, si bien tuvo una diferencia de pocos votos con quien perdió, él, Peña Nieto, que ganó, tenía todas las perspectivas para haber hecho un cambio positivo, que beneficiará a los mexicanos y sobre todo no olvidar que México es un país donde la voz la sigue teniendo el hombre y que no se le puede perdonar a nadie ante un conflicto decir, “voy a ver si comparto las culpas con otra persona” en el caso concreto con la que puede ser su cónyuge. ¿Qué ocurrió a partir del 2012? Damos un brinco a las siguientes elecciones, cuando en el año 2015 se vinieron los cambios de las Cámaras, donde se puso en juego el destino de varios Estados la República con las gubernaturas, donde el Presidente del partido era Manlio Fabio Beltrones; y todo lo demás que ya es vieja historia, las elecciones en Coahuila y todas las gubernaturas que se perdieron, que en este caso desde mi perspectiva no se pueden imputar a una persona o a quién era el Presidente del partido, sino a todos los que han estado en esa línea y que han colaborado para esa gran tragedia, por eso hablamos de que el fracaso del PRI último se gesta en este sexenio. También hay que considerar que conforme se fueron celebrando las elecciones y fueron perdiendo gubernaturas tradicionales, se fue reduciendo el poder del partido y desafortunadamente quienes acompañaban al Presidente no tuvieron la capacidad, no pudieron tener la perspectiva de lo que estaba ocurriendo y simplemente se voltea para atrás para decir el PRI es el responsable, estos y aquellos, pero no consideran los latrocinios, la corrupción si analizamos simplemente el caso de Duarte el de Veracruz, Duarte el de Chihuahua o el que estuvo en Quintana Roo, llegamos a la conclusión de que era como una banda de asaltantes, que al que despojaron fue al pueblo, el país y en consecuencia como ahora estamos en una verdadera democracia, aun cuando como los hemos dicho antes es a la mexicana, los votos se cuentan y lo hacen en forma y ahora ahí está el resultado, donde los mexicanos escogimos, decidimos, salimos a la calle y votamos por un candidato, no en contra del partido del PRI sino por un candidato. Es innegable que lo que ocurre en el 2015; y esto distinguidos lectores es muy importante, se repite estrepitosamente en este año 2018, cuando el partido en el poder, no tuvo entre sus distinguidos miembros, entre su militancia, uno que fuera digno de recibir la candidatura del PRI para competir en esas circunstancias y no cometer el error de buscar a alguien que no era del partido, que desde el inicio había nacido perdido y que los números no mienten, haber tenido el menor número de votos en la historia del PRI es la contundente respuesta a lo que estamos afirmando; incluso la otra alternativa del candidato Anaya, que sea como fuere tuvo más votos que el PRI, es una respuesta categórica a que se inició el triunfo brillante en el año 2012 cuando Peña Nieto arrolló; vino el declive y la caída a partir del 2015, los resultados están a la vista para los que quieran consultarlos; y se termina esto con la elección recientemente llevado a efecto el 1 de julio del presente año, donde los números no mienten y categóricamente se acaba de cavar la tumba del PRI, que ahora metieron al señor Juárez Cisneros como una emergencia, ante la impotencia, la incapacidad de Ochoa, que igualmente sin tener en cuenta ni sus antecedentes ni su capacidad. No había liderazgo, no había la capacidad, era evidente que no había con qué empujar, primero al candidato que no era del PRI y que finalmente parecía que sí y al final la gente no se convenció y no solamente no votaron en contra, sino que fueron y escogieron a otro candidato que la historia juzgará en su momento si es correcto.

¿CÓMO ERA EN EL PASADO; COMO ES EN EL PRESENTE Y CUÁL ES EL FUTURO DEL PRI?

Es evidente que habiendo sido un partido hegemónico y producto de la historia, debemos recordar a Elías Calles como logra agrupar a los sectores, da origen a un partido, que después se logra a partir de 1929 y 1930 hasta prácticamente el año 2000 mantener la hegemonía y sobretodo que el país caminara en determinado sentido; pero a partir del 2000 cuando irrumpe en la escena política un candidato de la oposición; repite otro la oposición a los seis años y finalmente el PRI recupera en el 2012 el poder, lo pierde, porque en este sexenio como ya dije antes entre 2015 y 2018 se escribe la historia que hoy todos conocemos y que categóricamente esto llevará al partido en el gobierno a un fracaso total, e incluso si se hablara de refundación, habría que voltear hacia las entrañas del partido para saber por qué tuvo ese fracaso

¿LOS MEXICANOS VOTARON CONTRA EL PRI O A FAVOR DE LÓPEZ OBRADOR?

Esta es una cuestión importante, porque se hablaba en el año 2000 de que las personas los ciudadanos habían votado en contra del partido y finalmente habían escogido al “alto vacío” para que finalmente tuviera la oportunidad histórica de hacer un cambio que fracasó desde el punto de vista que se vea, porque el resultado también está a la vista; ¿y qué ocurre después? Un propio elemento de ese partido renegado del mismo logra aún en contra de la opinión de quien estaba en el poder en ese momento, llegar a ser candidato de Acción Nacional, ganar la presidencia aun cuando como decían los que entonces dirigían el Tribunal Electoral, sí hubo trampas, sí hubo chanchullos, si se alteraron las cuestiones, si se dijo que López Obrador era el miedo, pero finalmente siempre usaron la palabra “tantito”; es decir no fue tanta la intervención como para que se alterara el resultado y al final el señor Calderón quedó como Presidente y el resultado está en la historia, por los miles de muertos o todos los fracasos, que el pueblo de México lo puede fácilmente constatar. Es evidente que cuando salen a votar, de un padrón de 90 millones, el 62% y de éstos 30 millones votan por López Obrador, es que la gente quería -y yo me cuento entre ellos- participar y votar para que hubiera un verdadero cambio y que fuera importante; en este caso hay que dar el beneficio de la duda al actual Presidente, que como hemos dicho antes todavía no es electo ni virtual; y ahí sus abogados deberían de estar plantados en el Tribunal Electoral, para sacar esa constancia a la brevedad por el bien de todos los mexicanos y especialmente de López Obrador; así es importante concluir en esta interrogante, que los que votamos queremos el cambio, somos 30 millones de mexicanos, que en este caso no estamos equivocados, aun cuando con el tiempo y probablemente en el 2024 volvamos a tener una opinión, de si escogimos bien o si cometimos un error.

CONCLUSIONES

Primera.- Tenemos que concluir que el PRI se acabó; que aun cuando se hable y se diga que va a haber una refundación, que ahora son otras personas etc. sugerimos que vean hacia adentro, que revisen lo que ocurrió en el año 2012, 2015, 2018, porque desafortunadamente todas las conductas, los hechos, la corrupción, la inseguridad, los muertos, todo lo que ha ocurrido en este sexenio, vino a dar como resultado el hartazgo de la gente, los que queremos el cambio, que votamos por López Obrador y que seguramente al tiempo sabremos si hicimos lo correcto; por lo pronto tenemos la convicción de que así fue y aun cuando ahora el PRI con sus 8 millones de votos, está pretendiendo reagruparse; y creo que lo más trascendente sería revisar, hacer un diagnóstico, por qué fracasaron, hacer un pronóstico, y entonces ponerse nuevas metas y probablemente no dentro de seis a lo mejor dentro de doce años puedan volver a recuperar el poder.

Segunda.- Todos los miembros del PRI en general que han participado en las actividades políticas, directa o indirectamente ayudaron al fracaso del partido; es decir todos son culpables; la incapacidad fue manifiesta en los altos mandos del gobierno por todas partes que se vea, hubo siempre fracasos, cambios de secretarios, fugas de presos célebres, paseos en Paris y toda una serie de cuestiones que hoy al hacer las cuentas en el 2018 nos damos por enterados que todos los dirigentes políticos, los que dirigieron el partido, locales y federales, tienen un grado de responsabilidad, porque la suma de los desastres, de la deshonestidad, de la corrupción, de la inseguridad, dieron por resultado que ya no queremos esa línea y por eso votamos por López Obrador.

Tercera.- Es evidente que están a la vista del público, están en la historia, las respuestas, las tranzas, los ex priistas que se consideran como tránsfugas del PRI que se fueron a otros partidos y que desde ahí empezaron a bombardear, también colaboraron a este fracaso que es evidente, en cuanto a los resultados, porque seguimos persiguiendo a Yarrinton y que ahora se queda en Italia; nadie encuentra a Duarte el que vive en Texas o en California al otro lado de los Estados Unidos y tampoco a los que están siendo perseguidos como el de Veracruz, que lucha con los amparos que se pudo escapar; y qué decir del que vendió los terrenos tan baratos a su propia familia en Quintana Roo y también el de Chihuahua; y finalmente el resultado ahí está, por eso dudamos de que pueda este partido recuperarse.

Cuarta.- 2021 y 2024 serán parámetros para conocer el destino del país si finalmente López Obrador con sus equipos y los nuevos personajes la está haciendo y daremos la respuesta dentro de tres años en las elecciones intermedias y el dictamen final vendrá en el 2024; y de ahí desde ahora que para nosotros podría ser un vaticinio que en ese año, dependiendo de lo que haga la señora que gobierna la Ciudad de México y la que va a gobernar el país, podemos pensar categóricamente que Claudia Sheinbaum pueda ser la primera mujer Presidenta de México en el año 2024.

Director de la Programación Digital de la Revista de Derecho Familiar “Pater Familias” de la UNAM. jhernandez366@hotmail.com

INTERROGANTES

¿Qué es y qué significa la palabra prospectiva? ¿2012 al 2018 se cavó la tumba del PRI? ¿Hechos innegables de su fracaso? ¿Cómo era en el pasado; como es en el presente y cuál es el futuro del PRI? ¿En las recientes elecciones los mexicanos votaron contra el PRI o a favor de López Obrador?

¿QUÉ ES Y QUÉ SIGNIFICA LA PALABRA PROSPECTIVA?

Esta palabra deriva de del latín prospectīvus que significa ver hacia el futuro, como técnica sirve para hacer diagnósticos de alguna institución, en este caso lo vamos hacer con el PRI, de cómo era en el pasado, su situación actual y cuál puede ser su futuro. La prospectiva de este partido es de desahucio, no se puede hablar ni siquiera de refundación, porque mientras no acepten los graves errores que cometieron en el pasado, sobre todo cuando deja de ser partido hegemónico y tiene que luchar democráticamente entre otros, como ocurrió con el alto vacío y también con el que le siguió los pasos, desafortunadamente esta es mi opinión personal; y vamos a analizar en este artículo los seis últimos años del PRI para encontrar que hay no sólo un culpable -Peña Nieto- sino quienes lo acompañaron y que con sus hechos, con sus actos, con sus malas conductas han desfondado y han provocado el descanso eterno del PRI. A mis distinguidos lectores les recomiendo en última instancia ver esta palabra en el diccionario que es muy importante, porque es la base y esencia de este artículo.

¿2012 AL 2018 SE CAVÓ LA TUMBA DEL PRI?

Categóricamente afirmamos que sí. El capital político que tuvo el actual Presidente en el año 2012 se fue dilapidando, se fue terminando, se fue tirando a la basura porque evidentemente en el momento que fue electo, si bien tuvo una diferencia de pocos votos con quien perdió, él, Peña Nieto, que ganó, tenía todas las perspectivas para haber hecho un cambio positivo, que beneficiará a los mexicanos y sobre todo no olvidar que México es un país donde la voz la sigue teniendo el hombre y que no se le puede perdonar a nadie ante un conflicto decir, “voy a ver si comparto las culpas con otra persona” en el caso concreto con la que puede ser su cónyuge. ¿Qué ocurrió a partir del 2012? Damos un brinco a las siguientes elecciones, cuando en el año 2015 se vinieron los cambios de las Cámaras, donde se puso en juego el destino de varios Estados la República con las gubernaturas, donde el Presidente del partido era Manlio Fabio Beltrones; y todo lo demás que ya es vieja historia, las elecciones en Coahuila y todas las gubernaturas que se perdieron, que en este caso desde mi perspectiva no se pueden imputar a una persona o a quién era el Presidente del partido, sino a todos los que han estado en esa línea y que han colaborado para esa gran tragedia, por eso hablamos de que el fracaso del PRI último se gesta en este sexenio. También hay que considerar que conforme se fueron celebrando las elecciones y fueron perdiendo gubernaturas tradicionales, se fue reduciendo el poder del partido y desafortunadamente quienes acompañaban al Presidente no tuvieron la capacidad, no pudieron tener la perspectiva de lo que estaba ocurriendo y simplemente se voltea para atrás para decir el PRI es el responsable, estos y aquellos, pero no consideran los latrocinios, la corrupción si analizamos simplemente el caso de Duarte el de Veracruz, Duarte el de Chihuahua o el que estuvo en Quintana Roo, llegamos a la conclusión de que era como una banda de asaltantes, que al que despojaron fue al pueblo, el país y en consecuencia como ahora estamos en una verdadera democracia, aun cuando como los hemos dicho antes es a la mexicana, los votos se cuentan y lo hacen en forma y ahora ahí está el resultado, donde los mexicanos escogimos, decidimos, salimos a la calle y votamos por un candidato, no en contra del partido del PRI sino por un candidato. Es innegable que lo que ocurre en el 2015; y esto distinguidos lectores es muy importante, se repite estrepitosamente en este año 2018, cuando el partido en el poder, no tuvo entre sus distinguidos miembros, entre su militancia, uno que fuera digno de recibir la candidatura del PRI para competir en esas circunstancias y no cometer el error de buscar a alguien que no era del partido, que desde el inicio había nacido perdido y que los números no mienten, haber tenido el menor número de votos en la historia del PRI es la contundente respuesta a lo que estamos afirmando; incluso la otra alternativa del candidato Anaya, que sea como fuere tuvo más votos que el PRI, es una respuesta categórica a que se inició el triunfo brillante en el año 2012 cuando Peña Nieto arrolló; vino el declive y la caída a partir del 2015, los resultados están a la vista para los que quieran consultarlos; y se termina esto con la elección recientemente llevado a efecto el 1 de julio del presente año, donde los números no mienten y categóricamente se acaba de cavar la tumba del PRI, que ahora metieron al señor Juárez Cisneros como una emergencia, ante la impotencia, la incapacidad de Ochoa, que igualmente sin tener en cuenta ni sus antecedentes ni su capacidad. No había liderazgo, no había la capacidad, era evidente que no había con qué empujar, primero al candidato que no era del PRI y que finalmente parecía que sí y al final la gente no se convenció y no solamente no votaron en contra, sino que fueron y escogieron a otro candidato que la historia juzgará en su momento si es correcto.

¿CÓMO ERA EN EL PASADO; COMO ES EN EL PRESENTE Y CUÁL ES EL FUTURO DEL PRI?

Es evidente que habiendo sido un partido hegemónico y producto de la historia, debemos recordar a Elías Calles como logra agrupar a los sectores, da origen a un partido, que después se logra a partir de 1929 y 1930 hasta prácticamente el año 2000 mantener la hegemonía y sobretodo que el país caminara en determinado sentido; pero a partir del 2000 cuando irrumpe en la escena política un candidato de la oposición; repite otro la oposición a los seis años y finalmente el PRI recupera en el 2012 el poder, lo pierde, porque en este sexenio como ya dije antes entre 2015 y 2018 se escribe la historia que hoy todos conocemos y que categóricamente esto llevará al partido en el gobierno a un fracaso total, e incluso si se hablara de refundación, habría que voltear hacia las entrañas del partido para saber por qué tuvo ese fracaso

¿LOS MEXICANOS VOTARON CONTRA EL PRI O A FAVOR DE LÓPEZ OBRADOR?

Esta es una cuestión importante, porque se hablaba en el año 2000 de que las personas los ciudadanos habían votado en contra del partido y finalmente habían escogido al “alto vacío” para que finalmente tuviera la oportunidad histórica de hacer un cambio que fracasó desde el punto de vista que se vea, porque el resultado también está a la vista; ¿y qué ocurre después? Un propio elemento de ese partido renegado del mismo logra aún en contra de la opinión de quien estaba en el poder en ese momento, llegar a ser candidato de Acción Nacional, ganar la presidencia aun cuando como decían los que entonces dirigían el Tribunal Electoral, sí hubo trampas, sí hubo chanchullos, si se alteraron las cuestiones, si se dijo que López Obrador era el miedo, pero finalmente siempre usaron la palabra “tantito”; es decir no fue tanta la intervención como para que se alterara el resultado y al final el señor Calderón quedó como Presidente y el resultado está en la historia, por los miles de muertos o todos los fracasos, que el pueblo de México lo puede fácilmente constatar. Es evidente que cuando salen a votar, de un padrón de 90 millones, el 62% y de éstos 30 millones votan por López Obrador, es que la gente quería -y yo me cuento entre ellos- participar y votar para que hubiera un verdadero cambio y que fuera importante; en este caso hay que dar el beneficio de la duda al actual Presidente, que como hemos dicho antes todavía no es electo ni virtual; y ahí sus abogados deberían de estar plantados en el Tribunal Electoral, para sacar esa constancia a la brevedad por el bien de todos los mexicanos y especialmente de López Obrador; así es importante concluir en esta interrogante, que los que votamos queremos el cambio, somos 30 millones de mexicanos, que en este caso no estamos equivocados, aun cuando con el tiempo y probablemente en el 2024 volvamos a tener una opinión, de si escogimos bien o si cometimos un error.

CONCLUSIONES

Primera.- Tenemos que concluir que el PRI se acabó; que aun cuando se hable y se diga que va a haber una refundación, que ahora son otras personas etc. sugerimos que vean hacia adentro, que revisen lo que ocurrió en el año 2012, 2015, 2018, porque desafortunadamente todas las conductas, los hechos, la corrupción, la inseguridad, los muertos, todo lo que ha ocurrido en este sexenio, vino a dar como resultado el hartazgo de la gente, los que queremos el cambio, que votamos por López Obrador y que seguramente al tiempo sabremos si hicimos lo correcto; por lo pronto tenemos la convicción de que así fue y aun cuando ahora el PRI con sus 8 millones de votos, está pretendiendo reagruparse; y creo que lo más trascendente sería revisar, hacer un diagnóstico, por qué fracasaron, hacer un pronóstico, y entonces ponerse nuevas metas y probablemente no dentro de seis a lo mejor dentro de doce años puedan volver a recuperar el poder.

Segunda.- Todos los miembros del PRI en general que han participado en las actividades políticas, directa o indirectamente ayudaron al fracaso del partido; es decir todos son culpables; la incapacidad fue manifiesta en los altos mandos del gobierno por todas partes que se vea, hubo siempre fracasos, cambios de secretarios, fugas de presos célebres, paseos en Paris y toda una serie de cuestiones que hoy al hacer las cuentas en el 2018 nos damos por enterados que todos los dirigentes políticos, los que dirigieron el partido, locales y federales, tienen un grado de responsabilidad, porque la suma de los desastres, de la deshonestidad, de la corrupción, de la inseguridad, dieron por resultado que ya no queremos esa línea y por eso votamos por López Obrador.

Tercera.- Es evidente que están a la vista del público, están en la historia, las respuestas, las tranzas, los ex priistas que se consideran como tránsfugas del PRI que se fueron a otros partidos y que desde ahí empezaron a bombardear, también colaboraron a este fracaso que es evidente, en cuanto a los resultados, porque seguimos persiguiendo a Yarrinton y que ahora se queda en Italia; nadie encuentra a Duarte el que vive en Texas o en California al otro lado de los Estados Unidos y tampoco a los que están siendo perseguidos como el de Veracruz, que lucha con los amparos que se pudo escapar; y qué decir del que vendió los terrenos tan baratos a su propia familia en Quintana Roo y también el de Chihuahua; y finalmente el resultado ahí está, por eso dudamos de que pueda este partido recuperarse.

Cuarta.- 2021 y 2024 serán parámetros para conocer el destino del país si finalmente López Obrador con sus equipos y los nuevos personajes la está haciendo y daremos la respuesta dentro de tres años en las elecciones intermedias y el dictamen final vendrá en el 2024; y de ahí desde ahora que para nosotros podría ser un vaticinio que en ese año, dependiendo de lo que haga la señora que gobierna la Ciudad de México y la que va a gobernar el país, podemos pensar categóricamente que Claudia Sheinbaum pueda ser la primera mujer Presidenta de México en el año 2024.

Director de la Programación Digital de la Revista de Derecho Familiar “Pater Familias” de la UNAM. jhernandez366@hotmail.com

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