/ viernes 20 de abril de 2018

¡Que llueva!

En estos días de intenso calor he escuchado recurrentemente a la población en general decir que ojala y pronto llueva; estamos a tres semanas de que se inicie la temporada de ciclones por el Océano Pacifico y a cinco semanas de que inicie la temporada de ciclones por el Océano Atlántico.

Las lluvias y lloviznas que se han venido presentando alternadamente en estos días han sido apenas muy ligeras, poco a poco las lluvias irán intensificándose y se estabilizarán hacia finales del mes de mayo, para dar paso a la temporada de lluvias durante los meses de junio, julio, agosto y septiembre; en estos cuatro meses del año llueve prácticamente todos los días en el bello estado de Morelos.

Es gracias a estas precipitaciones que la vegetación, las flores, la naturaleza, las barrancas, los ríos y los canales se vuelven a llenar de vida, todo el paisaje desértico que tenemos en algunos sitios reverdece durante estos meses; los acuíferos se recargan con el agua de estas lluvias y nos sirven para abastecer a los pozos de riego durante la temporada de estiaje.

También las presas se llenan con el agua de las lluvias, las cuales sirven para almacenar el recurso suficiente para poder regar los cultivos, las más de 5 mil hectáreasdurante el ciclo agrícola.

Las lluvias son sin duda una gran bendición para todos los morelenses, sin embargo, también pueden representar un gran peligro para la población que vive en zonas con riesgo de inundación; de acuerdo a los registros son más de 160 sitios en todo el estado, en los que viven poco más de 16 mil personas.

De acuerdo a las estadísticas proporcionadas por las autoridades, los ríos que presentan un mayor número de eventos, un mayor número de crecientes y que por lo tanto representan un mayor riesgo para la población son el río Yautepec, particularmente en tres municipios: Yautepec, Tlaltizapán y Tlaquiltenango.

Está también el río Apatlaco, en los municipios de Temixco, Xochitepec, Jojutla y Zacatepec; el río Cuautla, en los municipios de Cuautla y Ayala; el río Chalma-Tembembe en Puente de Ixtla o en algunas otras localidades cercanas.

Es sumamente importante que la población tenga respeto por la naturaleza, ya que se pueden hacer obras que disminuyan el riesgo, pero cuando ocurre un evento extraordinario o extremo, no hay forma de garantizar que no habrá peligro para la población.

Es muy importante que las personas que viven en estas zonas de riesgo salgan al menos durante estos meses de esos sitios; muchos no quieren hacerlo porque argumentan que perderán sus bienes, pero si no lo hacen es posible que pierdan no solo sus bienes, sino sus vidas.

Ojalá y todos tomemos conciencia de la necesidad de tener respeto por la naturaleza, de no invadir sus cauces, sus ríos, sus barrancas porque tarde o temprano la naturaleza reclamará su espacio. #aguaparatodos

En estos días de intenso calor he escuchado recurrentemente a la población en general decir que ojala y pronto llueva; estamos a tres semanas de que se inicie la temporada de ciclones por el Océano Pacifico y a cinco semanas de que inicie la temporada de ciclones por el Océano Atlántico.

Las lluvias y lloviznas que se han venido presentando alternadamente en estos días han sido apenas muy ligeras, poco a poco las lluvias irán intensificándose y se estabilizarán hacia finales del mes de mayo, para dar paso a la temporada de lluvias durante los meses de junio, julio, agosto y septiembre; en estos cuatro meses del año llueve prácticamente todos los días en el bello estado de Morelos.

Es gracias a estas precipitaciones que la vegetación, las flores, la naturaleza, las barrancas, los ríos y los canales se vuelven a llenar de vida, todo el paisaje desértico que tenemos en algunos sitios reverdece durante estos meses; los acuíferos se recargan con el agua de estas lluvias y nos sirven para abastecer a los pozos de riego durante la temporada de estiaje.

También las presas se llenan con el agua de las lluvias, las cuales sirven para almacenar el recurso suficiente para poder regar los cultivos, las más de 5 mil hectáreasdurante el ciclo agrícola.

Las lluvias son sin duda una gran bendición para todos los morelenses, sin embargo, también pueden representar un gran peligro para la población que vive en zonas con riesgo de inundación; de acuerdo a los registros son más de 160 sitios en todo el estado, en los que viven poco más de 16 mil personas.

De acuerdo a las estadísticas proporcionadas por las autoridades, los ríos que presentan un mayor número de eventos, un mayor número de crecientes y que por lo tanto representan un mayor riesgo para la población son el río Yautepec, particularmente en tres municipios: Yautepec, Tlaltizapán y Tlaquiltenango.

Está también el río Apatlaco, en los municipios de Temixco, Xochitepec, Jojutla y Zacatepec; el río Cuautla, en los municipios de Cuautla y Ayala; el río Chalma-Tembembe en Puente de Ixtla o en algunas otras localidades cercanas.

Es sumamente importante que la población tenga respeto por la naturaleza, ya que se pueden hacer obras que disminuyan el riesgo, pero cuando ocurre un evento extraordinario o extremo, no hay forma de garantizar que no habrá peligro para la población.

Es muy importante que las personas que viven en estas zonas de riesgo salgan al menos durante estos meses de esos sitios; muchos no quieren hacerlo porque argumentan que perderán sus bienes, pero si no lo hacen es posible que pierdan no solo sus bienes, sino sus vidas.

Ojalá y todos tomemos conciencia de la necesidad de tener respeto por la naturaleza, de no invadir sus cauces, sus ríos, sus barrancas porque tarde o temprano la naturaleza reclamará su espacio. #aguaparatodos

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