…al día de hoy, no hay ningún detenido. Ninguno de los Zares del Huachicol, ningún operador, chofer o vendedor de bidones; tampoco dueños, gerentes o administradores de gasolineras identificadas con la venta de combustible robado. Ningún potentado de cuello blanco ni ningún descamisado. Sigue el desabasto en el centro productivo del país (ya se siente y resiente en nuestro estado) y no se ve ni para cuando. Las más de 500 pipas y 2 mil choferes que ganarán 30 mil pesos al mes, serán insuficientes.
La refinería de Salamanca suspendió operaciones y siguen los ¿sabotajes? o “accidentes” en ductos, ahora también de los que transportan gas, como en la carretera Puebla-Córdoba-Orizaba. Y el mercado negro del etanol está a todo lo que da. Porque la corrupción no tiene ideología: puede ser Prianista o Primorosa.
En Michoacán (donde Felipe Calderón lazó su guerra contra el narco y Peña vio nacer las autodefensas) López Obrador culpa al gobernador Silvano Aureoles de no atender el conflicto con la CNTE, pues andaba de gira por Europa. Y aunque ya le pagaron a la coordinadora, continúan bloqueando las vías ferroviarias, con el consiguiente caos en la distribución de mercancías y productos perecederos. En el sureste, en contraparte, el Tren Maya va, pasando por encima de todos los ecosistemas.
"No voy a reprimir al pueblo", dice AMLO. Pero aplicar la ley es proteger los derechos de terceros, no reprimir. Hay un grave riesgo de que nuevo gobierno quede atrapado en la misma lógica de siempre: la extorsión de estos grupos. Las mermas son millonarias. Como en las AFORES que han perdido 200 mil millones de pesos tras la cancelación del aeropuerto en Texcoco. Y el gobierno de AMLO les está metiendo la mano para financiarse. ¡Qué peligroso! En el norte, en Matamoros, Tamaulipas, 40 maquiladoras entraron en paro y las cifras de desempleo son las más altas en años.
Mientras todo esto ocurre, el presidente López anuncia un tianguis de vehículos “Fifís” (entre ellos Audis, más 171 blindados o semi blindados) y 76 aviones y helicópteros en la Base Aérea de Santa Cecilia. Espera recaudar al menos 100 millones de pesos que irían a la Guardia Nacional. Por si se animan, el 23 y 24 de febrero, también habrá al mejor postor motocicletas, tracto camiones, tractores, autobuses y remolques.
Acá en Morelos también hay ánimo recaudatorio, con el famoso reemplacamiento que sigue en veremos. La UAEM espera recaudar recursos para pagar nóminas y la Fiscalía General del Estado (FGE) también espera contar con qué operar, pues está semi paralizada o de plano, en paro. El paquete económico sigue entrampado en el Congreso del Estado y los recortes federales han alcanzado a las estancias infantiles de lo que fue Sedesol, con el perjuicio a quienes las operan y para los padres que no tienen quien cuide a sus hijos para ir a trabajar.
Dura, la cuesta de enero. Y hoy, y porque desde 1964, para conmemorar la muerte de Gandhi, se celebra el 30 de enero como el Día de la No Violencia y la Paz, reconocido por la UNESCO, recordemos lo que dijo Mahatma (“alma grande”) “La pobreza es la peor forma de violencia”.
Hasta la próxima entrega, donde podrán seguir leyendo lo que hay en mi mente.
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