/ lunes 8 de noviembre de 2021

Violencia virtual en Escuelas

Cinthia Vique Mendoza


La modalidad virtual en la educación de los niños y jóvenes ha sido la principal alternativa a la que se han acogido los colegios y demás instituciones educativas con el fin de seguir llevando a cabo los procesos académicos y formativos en tiempos de Pandemia. Y hay que recordar que la Pandemia todavía no termina. Es por esto que el Ministerio Internacional de Derechos Humanos Jurisdicción Morelos y la Dirección de Educación, está ofreciendo pláticas, conferencias y cursos sobre el acoso escolar y el ciberbullying.

Los padres y tutores son los principales responsables de la educación digital de los hijos y menores, pero en el caso del acoso escolar, ciberacoso, o ciberbullying surge habitualmente una duda, ¿tiene que intervenir el centro educativo correspondiente? ¿en qué medida?

La respuesta es sí, ya que el acoso a través del entorno digital se produce 24×7 por lo que tiene lugar en el espacio donde los niños pasan la mayor parte de su tiempo: el colegio.

El problema es que la mayoría de los centros todavía no están preparados para hacer frente a estas situaciones. Para ello es necesario apoyarse y conocer los pasos a seguir ante los casos de bullying y ciberbullying en la Escuela.

Particularidades del ciberacoso

El ciberacoso no deja de ser el acoso escolar tradicional llevado al ámbito online. Aún así, el entorno digital le confiere ciertas características que lo hacen todavía más peligroso:

Escenario virtual presente las 24 horas: estamos conectados a Internet permanentemente a través de los teléfonos móviles, ordenadores. El ciberbullying impregna todos los ámbitos de la vida e invade el espacio personal de la víctima. Las agresiones y victimización se producen las 24 horas del día los 7 días de la semana.

  • Anonimato: las nuevas tecnologías ofrecen a los acosadores un entorno donde agredir desde el anonimato. Un hecho que agrava los efectos de bullying ya que la víctima desconoce quienes son sus agresores.
  • Acoso público: Internet permite que infinitas personas participen en el acoso a otro.
  • Reiteración: el ciberbullying es un acoso que se repite o prolonga en el tiempo. El medio online permite la distribución y copia de archivos que, aunque el agresor sólo los utilice una vez, permanecen en el tiempo y siguen produciendo daño a la víctima.
  • Intencionalidad: la falta de conocimiento sobre Internet provoca que en ocasiones se den casos de ciberbullying no intencionado. Por ejemplo poniendo un comentario negativo sobre alguien en una red que crees privada y que al final acaba viendo personas ajenas.

En cuanto a otros aspectos esenciales, ya hemos hablado en el blog de temas como qué es el ciberbullying y qué consecuencias legales tiene, cómo detectar si un menor está siendo víctima de ello o cómo actuar si es tu hijo el que participa en el acoso escolar o ciberbullying.

Protocolo de actuación ante casos de ciberacoso en el colegio.

Cualquier miembro de la comunidad educativa que sospeche o tenga conocimiento de un caso de ciberacoso en el colegio debe comunicarlo al equipo directivo del centro. El cual debe establecer los procedimientos específicos para la detección e intervención de este tipo de casos:

  • Valoración: se debe establecer un proceso de recogida de información que sirva para valorar el caso de ciberbullying.
  • Comunicación: una vez detectado un caso de ciberbullying, se debe comunicar al director del centro y a las familias de los alumnos implicados.

La colaboración entre familia-centro es primordial.

Acciones de protección: establecer las medidas para proteger a la víctima y las pautas para tratar al ciberacosador.

Medidas con el alumnado

  • Motivar a los alumnos para que denuncien casos de ciberacoso. Fomentando la reflexión y haciéndoles ver que pueden ayudar a alguien.
  • Tratar en el aula el tema del buen uso de Internet.
  • Implementar programas de habilidades sociales, desarrollo personal y moral.
  • Establecer un diálogo con ellos.
  • Realizar análisis de potenciales riesgos en Internet.
  • Analizar los usos que hacen de Internet.
  • Tratar el tema del ciberbullying en clase.
  • Promover la comunicación entre padres y colegio.
  • Fortalecer su autoestima y autoconfianza.
  • Valorar sus cambios por muy pequeños que sean.

En cuanto a la víctima, se deberá establecer si son necesarias otras medidas especificas a las ya mencionadas que intensifiquen la respuesta del centro contra la situación de acoso, ofreciéndole apoyo y brindándole seguridad.

Cinthia Vique Mendoza


La modalidad virtual en la educación de los niños y jóvenes ha sido la principal alternativa a la que se han acogido los colegios y demás instituciones educativas con el fin de seguir llevando a cabo los procesos académicos y formativos en tiempos de Pandemia. Y hay que recordar que la Pandemia todavía no termina. Es por esto que el Ministerio Internacional de Derechos Humanos Jurisdicción Morelos y la Dirección de Educación, está ofreciendo pláticas, conferencias y cursos sobre el acoso escolar y el ciberbullying.

Los padres y tutores son los principales responsables de la educación digital de los hijos y menores, pero en el caso del acoso escolar, ciberacoso, o ciberbullying surge habitualmente una duda, ¿tiene que intervenir el centro educativo correspondiente? ¿en qué medida?

La respuesta es sí, ya que el acoso a través del entorno digital se produce 24×7 por lo que tiene lugar en el espacio donde los niños pasan la mayor parte de su tiempo: el colegio.

El problema es que la mayoría de los centros todavía no están preparados para hacer frente a estas situaciones. Para ello es necesario apoyarse y conocer los pasos a seguir ante los casos de bullying y ciberbullying en la Escuela.

Particularidades del ciberacoso

El ciberacoso no deja de ser el acoso escolar tradicional llevado al ámbito online. Aún así, el entorno digital le confiere ciertas características que lo hacen todavía más peligroso:

Escenario virtual presente las 24 horas: estamos conectados a Internet permanentemente a través de los teléfonos móviles, ordenadores. El ciberbullying impregna todos los ámbitos de la vida e invade el espacio personal de la víctima. Las agresiones y victimización se producen las 24 horas del día los 7 días de la semana.

  • Anonimato: las nuevas tecnologías ofrecen a los acosadores un entorno donde agredir desde el anonimato. Un hecho que agrava los efectos de bullying ya que la víctima desconoce quienes son sus agresores.
  • Acoso público: Internet permite que infinitas personas participen en el acoso a otro.
  • Reiteración: el ciberbullying es un acoso que se repite o prolonga en el tiempo. El medio online permite la distribución y copia de archivos que, aunque el agresor sólo los utilice una vez, permanecen en el tiempo y siguen produciendo daño a la víctima.
  • Intencionalidad: la falta de conocimiento sobre Internet provoca que en ocasiones se den casos de ciberbullying no intencionado. Por ejemplo poniendo un comentario negativo sobre alguien en una red que crees privada y que al final acaba viendo personas ajenas.

En cuanto a otros aspectos esenciales, ya hemos hablado en el blog de temas como qué es el ciberbullying y qué consecuencias legales tiene, cómo detectar si un menor está siendo víctima de ello o cómo actuar si es tu hijo el que participa en el acoso escolar o ciberbullying.

Protocolo de actuación ante casos de ciberacoso en el colegio.

Cualquier miembro de la comunidad educativa que sospeche o tenga conocimiento de un caso de ciberacoso en el colegio debe comunicarlo al equipo directivo del centro. El cual debe establecer los procedimientos específicos para la detección e intervención de este tipo de casos:

  • Valoración: se debe establecer un proceso de recogida de información que sirva para valorar el caso de ciberbullying.
  • Comunicación: una vez detectado un caso de ciberbullying, se debe comunicar al director del centro y a las familias de los alumnos implicados.

La colaboración entre familia-centro es primordial.

Acciones de protección: establecer las medidas para proteger a la víctima y las pautas para tratar al ciberacosador.

Medidas con el alumnado

  • Motivar a los alumnos para que denuncien casos de ciberacoso. Fomentando la reflexión y haciéndoles ver que pueden ayudar a alguien.
  • Tratar en el aula el tema del buen uso de Internet.
  • Implementar programas de habilidades sociales, desarrollo personal y moral.
  • Establecer un diálogo con ellos.
  • Realizar análisis de potenciales riesgos en Internet.
  • Analizar los usos que hacen de Internet.
  • Tratar el tema del ciberbullying en clase.
  • Promover la comunicación entre padres y colegio.
  • Fortalecer su autoestima y autoconfianza.
  • Valorar sus cambios por muy pequeños que sean.

En cuanto a la víctima, se deberá establecer si son necesarias otras medidas especificas a las ya mencionadas que intensifiquen la respuesta del centro contra la situación de acoso, ofreciéndole apoyo y brindándole seguridad.