El público abarrotó la sala Manuel M. Ponce del Centro Cultural Jardín Borda para disfrutar el magnífico concierto de Theremin, considerado como el único instrumento en el mundo que se toca sin tocar, el cual estuvo a cargo del talentoso músico Ernesto Mendoza.
Cabe destacar que este concierto fue realizado por la Secretaría de Turismo y Cultura en coordinación con el Colegio de Médicos Cirujanos del estado de Morelos A.C., por lo que fue presentado por Helena González y Svetlana Tkachenko.
Cuernavaca es una ciudad mágica con una gran historia y gente maravillosa, vivimos aquí desde hace 20 años y a veces suceden cosas tan increíbles como el concierto de hoy. En una ocasión, hubo un pequeño concierto en mi casa y el maestro Omar Cerezo nos presentó a Ernesto Mendoza, fue ahí cuando escuchamos este instrumento por primera vez en la vida y nos sorprendió mucho, porque sin tocarlo se pueden evocar sonidos, expresó Svetlana Tkachenko, integrante del Colegio de Médicos Cirujanos del estado de Morelos A.C.
Bárbara Benítez fue la encargada de conducir el evento, presentando una pequeña parte de la historia del Theremin, el cual surge en Rusia, y dio la bienvenida al talentoso músico para iniciar el concierto.
Ernesto Mendoza dio una breve explicación sobre la ejecución del instrumento e inició las magníficas interpretaciones, deleitando a los presentes con las piezas “Gabriel´s Oboe” de Ennio Morricone; Le Cygne de Camille Saint Saëns; Les Berceaux de Gabriel Fauré; Vocalise de Serguéi Rachmáninov; Estrellita de Manuel M. Ponce; O mio Babbino Caro de Giacomo Puccini; Clair de Lune de Claude Debussy y Bachianas Brasilerias Aria 5 de Heitor Villalobos.
Posteriormente, invitó a algunos asistentes a tener un mayor acercamiento con el Theremin e intentar tocarlos; asimismo, realizó una sesión de preguntas y respuestas para interactuar con el público y resolver varias dudas acerca del instrumento.
Finalmente, Ernesto Mendoza invitó a Omar Cerezo en el piano, para interpretar la delicada y elegante pieza Oblivion del reconocido músico y compositor argentino Astor Piazzolla, la cual fue compuesta en 1984 y es una pieza que refiere al olvido profundo.
Los asistentes despidieron con aplausos y de pie a los músicos reconociendo su calidad artística y enorme talento.