Inaugura Alejandro Hernández Raíces

Esta exposición se realizó como parte del Día Internacional de la Lengua Materna, a través de 23 obras

Maritza Cuevas | El Sol de Cuernavaca

  · miércoles 26 de febrero de 2020

Alejandro Hernández López / Fotos: Maritza Cuevas | El Sol de Cuernavaca

El público se dio cita en la cafetería Resiliente ubicada en el Cine Morelos, durante la inauguración de la exposición de pintura Raíces de Alejandro Hernández López originario de Temimilcingo, Tlaltizapan.

Esta exposición, que se realizó como parte del Día Internacional de la Lengua Materna, a través de 23 obras realizadas con tintas y pinturas creadas a partir de pigmentos naturales, enmarca el universo del tiempo, la particular del color en un arcoíris temáticos que nos lleva del épico pasado indígena hasta la alegoría de su cosmovisión etérea que ha permeado hasta nuestros días.

Durante la inauguración, Alejandro Hernández compartió un poco de su historia de vida y la importancia de no olvidar las raíces que nos dan identidad, y es justamente lo que quiere reflejar en estas obras, las cuales representan una mirada al pasado que nos da identidad cultural.

Desde los cuatro años de edad, sentía esa necesidad de expresar y sabía que quería dedicarme al arte porque hacía mis propios juguetes con barro, ahí logro darme cuenta de la importancia que tiene pertenecer a un lugar, a una comunidad y que a raíz de eso la mente, el corazón y el alma se aferra a lo que hay en ese sitio. Por diversas circunstancias, hacemos a un lado nuestra preciosa identidad indígena, pero no debemos olvidarnos del origen, al contrario debemos sentirnos orgullosos, expresó Alejandro Hernández López.

"Astrología".

"Regreso al pasado".

El artista, estudió dibujo y pintura en el Instituto Regional de Bellas Artes de Cuernavaca bajo la tutela del maestro Guillermo Monroy, y desde aquel tiempo dio muestra de su gran talento como creador a través de un lenguaje propio y único.

Algo intangible nos acerca y conmueve en la obra de Alejandro Hernández, algo que nos remite al más profundo del ser, algo que surge desde el pequeño terruño materno, ahí donde nutriendo todas las raíces de la vida se han quedado nuestros ombligos. Alejandro ha sabido conjugar sensibilidad para plasmar en sus cuadros la raíz que nos da origen, con la responsabilidad de su ser comunitario, ocupando el cargo de ayudante municipal, el de promotor cultural e integrante de la Coordinadora de Grupos Culturales Indígenas y Populares, se puede leer en el texto de sala que acompaña a la exposición.

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