Hace algunos sexenios para ser más exacta en el gobierno del Presidente Adolfo López Mateos, quería darle una visión distinta al Bosque de Chapultepec, y lo transformo, la segunda sección del Bosque, pero quería cultura, diversión, conocimiento, se apoyo en el urbanista y diseñador Arq. Pedro Ramírez Vázquez, para que hiciera el proyecto del Museo Nacional de Antropología, Adolfo López Mateos, lo instruyó para que las culturas Maya, Olmeca, Azteca, entre otras, fueran conocidas en un recito de la talla de museos internacionales.
El Presidente le comentó que cuando estudiaba la secundaria lo llevaron a un pueblo cerca de Texcoco, y que le llamó mucho la atención aquella excursión dónde vieron un monolito de un tamaño muy considerable, el Arquitecto Ramírez Vázquez, con todas las indicaciones no tardo en visitar aquel pueblo dónde efectivamente estaba el monolito. Ramírez Vázquez inmediatamente, lo visualizó en la entrada del Museo de Antropología.
Ya localizado el monolito instruyó a un equipo de hombres y apoyándose del ejército y policía, y elaboraron un plan para el traslado del monolito, y así fue. Los pobladores de aquel pueblo se rehusaban al traslado de la piedra como le llamaban, los pobladores con sus creencias pensaban en la cosecha ya que la piedra tiene unas cavidades de fertilidad, donde colocaban el maíz, para una buena cosecha, buena prosperidad; esta fiesta la realizaban justo el día de San Miguel Arcángel, el pueblo se daba cita cerca de la piedra, para el arranque de una buena cosecha y era una gran celebración.
Se diseño una logística para trasladar el monolito hasta el lugar donde sería colocado. El sacar de Coatlinchán al monolito, daño mucho al pueblo, la gente peleando con los soldados, gritaban ¡no se lo lleven! ¡no se lo lleven!, con los nopales golpearon a los soldados, poncharon las llantas del tráiler, pero hoy vemos a “Tláloc” ahí colocado desde hace 54 años.
Ese pueblo quedo desolado, nunca más tuvo turismo y literalmente el pueblo se murió, el gobierno después les mando una figura simulando al monolito, dejaron testigos el Instituto Nacional de Historia, en el lugar, pero en realidad nada volvió hacer lo que tenía de maravilloso ese pueblo. Los pobladores adultos mayores, relatan muy bien la historia, y después de muchos años se sabe que no es Tláloc, el que está afuera del Museo Nacional de Antropologia, es Chalchiuhtlicue. La piedra la sacaron un 16 de abril de 1964 , ahí en la falda de la montaña y cerros, a más de 4 mil metros de altura. El Arquitecto Ramírez Vázquez, sólo recibió órdenes de parte del señor Presidente Adolfo López Mateos. Coincidencias, casualidades a 100 años del nacimiento de Pedro Ramírez Vázquez.
Después también realizó varias obras emblemáticas en la Ciudad de México la nueva Basílica de Guadalupe, con un gran diseño, que hoy permite ver a la Virgen desde cualquier punto, el Estadio Azteca.
