A tres años de la pandemia, la UAEM fue capaz de superar las adversidades, declaró el rector Gustavo Urquiza Beltrán, pero no sólo eso, a cinco años de asumir el cargo como rector, logró restablecer las finanzas que le heredó su antecesor Alejandro Vera Jiménez, quien actualmente está prófugo de la justicia.
“Son números positivos, tenemos estabilidad en la universidad. El déficit estamos a un tercio de abatir, y esperemos que en estos nueves meses que nos quedan disminuirlo al mínimo...estos cinco años fueron de compromisos, de ajustarnos el cinturón y obtuvimos resultados”, compartió en entrevista.
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Este marzo del 2023, el rector ofreció su informe de manera presencial frente a los integrantes del Consejo Universitario, y autoridades de los tres órdenes de gobierno.
“La UAEM es una de las diez mejores universidades del país, y no lo decimos nosotros, lo dicen los indicadores impuestos por la Secretaría de Educación Pública (SEP), que evalúan a todas y cada una de las universidades estatales. Tenemos una matrícula de 40 mil 187 estudiantes, 10 mil 215 en el nivel bachillerato, 28 mil 665 en licenciatura, y mil 307 en posgrados”, detalló.
El Campus Norte concentra al 77.5 por ciento del alumnado, y el resto se divide en el oriente, poniente y sur.
Urquiza Beltrán compartió que en el último año, se logró el 4.25 por ciento de incremento en el subsidio público federal. El plan de austeridad logró un ahorro de ocho millones de pesos por año, se liquidó el préstamo con el Grupo Financiero Interacciones y recibieron 19.5 millones de pesos del Fondo de Aportaciones Múltiples (FAM).
Además, el rector precisó que la producción científica de los investigadores aumentó pues se publicaron 512 artículos en revistas científicas, hay 26 obras en proceso de publicación y 32 libros con sello universitario. También hay nueve solicitudes de patentes y se obtuvieron tres nuevas patentes.
Universidades libres de violencia
Previo a su mensaje, Eduardo Gerardo Rosas González, director de fortalecimiento Institucional de la dirección general de educación superior de la SEP, reconoció el compromiso del rector y le pidió redoblar el paso para que las universidades estatales sean los lugares “más seguros” del orden social.
“Las universidades son agentes de cambio. Deben promocionar el respeto de los derechos humanos dentro y fuera de la universidad, en un marco de inclusión, igualdad e interculturalidad, generando una cultura de paz, convirtiéndose en espacios seguros, libres de violencia”, dijo.
La universidad pública para muchos, enfatizó, es la única oportunidad de tener un futuro y mejor calidad de vida, adquirir conocimiento y formar una comunidad.
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