Guitarras estridentes, cabellos largos, alcohol, sexo, drogas y rock & roll son las primeras palabras que te llegan a la mente cuando piensas en este género musical, que hasta la fecha ha sido uno de los más transgresores y revolucionarios en la historia de la música, me atrevería a decir, la música que cambió al mundo.
Dos razas que se unieron en el arte, dos raíces completamente diferentes fusionadas en un mismo ritmo, la cultura negra y la cultura de los blancos. Los primeros llegaron con el jazz y con un blues (sinónimo de melancolía en inglés), una música nostálgica, triste, llena de matices en la voz y cargada de sentimiento; los segundos, emigrantes de europeos en Estados Unidos trajeron consigo la música instrumental del country, el western y el folk. Ambas, amalgamas perfectas que dieron lugar al innovador sonido del R&B, y que más tarde, a inicios de los 50´s se fusionarían para crear una explosiva corriente musical: El Rock n´roll.
Elvis Presley, Little Richard, Chuck Berry son algunas de las figuras más emblemáticas de este género que rompió con los cánones y los modelos establecidos de la época, después Los Beatles y los Rolling Stones, dos fenómenos mundiales del rock que marcaron una pauta para los nuevos movimientos contraculturales que se gestarían más tarde a mediados de los 60´s e inicios de los 70´s, los cuales llegaron con una oleada de nuevos músicos trasgresores que hablaron de la liberación sexual, la búsqueda de la libertad y el placer, llegaron con sus guitarras y sus voces cargadas de pasión, los bolsillos llenos de mariguana y LCD y con una ideología imperante de rechazo a la guerra y al establishment.
En Cuernavaca, a pesar de la gran popularidad que ha alcanzado esta música, las bandas de rock y metal han disminuido considerablemente conforme el paso de los años en nuestra ciudad, ¿la razón?, probablemente porque nuevos géneros musicales con ritmos y letras más pegajosos como el pop o el reggaetón han conquistado los oídos de nuevos jóvenes y adolescentes. No era de extrañarse que hasta hace algunos años las reuniones de metaleros se concentraran en puntos específicos de la ciudad: El rincón de María y el Pit, por mencionar algunos. Las tocadas eran cosa de todos los días, por aquí y por allá, ahora tan sólo unas cuantas bandas de antaño perduran, sin embargo, el resurgimiento de nuevas agrupaciones y la aparición de nuevas propuestas musicales continúan innovando y desarrollando la escena local.
Cuernavaca ha tenido diferentes épocas, algunas más heavys, otras más blackers, otras más góticas y demás, pero hoy en día algunas de las bandas locales de rock y metal más escuchadas son: Burning House, Old Wave, Los Cardíacos, Chronos, Reactor, Runagual, Arcano, Darkness, Padre Nuestro, Trinidad & Tabaco, Skela Folk, Agggressor, entre otras. Algunas que han desaparecido: Forcer o Syvil.
En la ciudad siguen existiendo algunos foros y espacios multidisciplinarios para la difusión y el apoyo a esta música, como el foro The Pit, Funky Donkey, Ataraxia Centro Cultural y el foro del Manojo, sin embargo muchos otros han pasado a la historia, como Pepe el Toro, El Rincón de María o el Sanatorium. A pesar de que Cuernavaca por ser una ciudad pequeña, no cuenta con muchos festivales y eventos de rock/metal anuales, las mismas bandas dentro del medio se apoyan mutuamente y se organizan para realizar tocadas y eventos cada cierto tiempo, en casas y en pequeños foros, por lo que sigue existiendo este sentimiento se solidaridad y apoyo mutuo entre la misma gente de la escena. A pesar de esto algunos consideran que el gobierno de la ciudad necesita apoyar más la gestión de festivales anuales que promuevan y apoyen este tipo de música.
En entrevista, Gustavo López, bajista de la banda de Heavy metal, Runagual Rock Ritual, comenta que a pesar de que existen foros que apoyan la escena local como el foro Funky Dunkey, que es el que más ha venido realizando eventos en la ciudad, como el Toquín del Funky Donkey o el Garden of Doom, no generan muchos recursos para los organizadores ni para las bandas, por lo que considera que necesita haber más apoyo por parte del mismo gobierno.
Por su parte, Bennet Garcés Pérez, baterista de la banda de rock progresivo, Trinidad & Tabaco, considera que el apoyo en conjunto de la escena musical y artística los ha ayudado a desarrollarse y les ha dado el impulso necesario para crecer, sin embargo, también considera que algunos espacios están restringidos por cuestiones de tendencias o preferencias musicales.