Pese a las restricciones de la pandemia este fin de semana se desbordo el arribo de bañistas no solo a los parques acuáticos y balnearios en los espacios de acceso público “libre” como las riveras de los ríos y canales de riego que se saturaron.
Mientras en los parques acuáticos y balnearios se restringió el flujo de visitantes a un 25 por ciento, dando prioridad a las reservaciones y rechazando a familias al llegar al cupo límite permitido, en los canales de riego y los ríos, decenas de familias arribaron desafiando a las autoridades y sus operativos.
En el Apatlaco, pese a la aguda contaminación que arrastra desde Cuernavaca, en Xoxocotla y Tetelpa las familias disfrutan se meterse en diferentes puntos donde aseguran las aguas están limpias, hay quienes incluso pescan los vecinos de estas comunidades indígenas.
En Tlaltizapán además de los canales de riego tienen el río dulce que nace en este mismo municipio y que es fuente de abastecimiento de agua potable y los excedentes forman el pequeño río dulce que desemboca en el río Yautepec, pero que en varios de sus tramos la gente entra para disfrutar de sus frías aguas.
Pero es sin da la “alberca” más grande el canal de las estacas, uno de los ramales pasa por Temilpa, donde uno de los lugares más concurridos por bañistas son las compuertas, entre muchos otros tramos, donde la gente se da cita, incluso vendedores de bebidas, comida, botanas.
Lo mismo pasa con el canal de la “quita toma” que pasa de Tlaltizapán, a Zacatepec, Tetelpa, Galeana y llega a Jojutla y en diferentes tramos de este canal las familias arriban y montan sus campamentos y mientras unos nadan otros preparan parrilladas o la comida, aunque muchos ya la llevan preparada.
Pero este fin de semana los balnearios rústicos de Tlaquiltenango como Las Huertas, Paraíso, las Tortugas, Manantiales, volvieron a reactivarse con un importante arribo de visitantes que pidieron volver a disfrutar de las aguas de estos importantes yacimientos.
Por lo que se espera que a partir del lunes que se pasa a Semáforo Amarillo, se pueda ampliar la capacidad de atención, y puedan mejorar la crisis que padecen desde el año pasado que se vieron obligados a cerrar para evitar mayor número de contagios por la pandemia del Covid-19.
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