El presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Raúl Hernández Cruz, emitió una recomendación por el caso del fallecimiento de 15 bebés en el hospital “José G. Parres”.
Se les ordena a las autoridades del hospital pagar los gastos funerarios de las víctimas.
Que se inscriba en el registro estatal de víctimas a los padres de los bebés.
Elaborar un plan de reparación conforme a la legislación en coordinación con instancias Comisión Ejecutiva de Víctimas.
En un término mayor de un mes para que tome medidas y acciones para asegurar la disponibilidad de todos los insumos, entre otros.
El ombudsman dijo que la investigación se integró conforme a las autoridades involucradas en los hechos, de los expedientes clínicos de cada uno de los bebés fallecidos, se trabajó la exhumación de algunos cuerpos para conocer los motivos por los que fallecieron y se trabajó en un informe de la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios del Estado de Morelos que fue consecuencia de una inspección que se hizo en el hospital.
Entre los testimonios de los padres de familia relució que personal de Salud de la unidad no contaba con las medidas de sanidad, la entrada de personas ajenas sin las medidas de protección higiénica para ingresar al área de los infantiles.
En las investigaciones se observó que la cisterna de 450 mil litros, con cuatro compartimientos abundaba sedimento y material vegetal flotando, entre otros factores.
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Asimismo en la unidad de cuidados especiales se encontró presencia de polvo en mobiliario, en las cunas radiantes y en gabinetes tomas fijas de oxigeno y aire, entre otras observaciones; además de falta de personal y material suficientes en los turnos.
Señaló que la falta de condiciones de higiene, los escasez de insumos, la falta de personal y el incumplimiento de cumplimientos epidemiológicos propició el ambiente para el fallecimiento de los 15 recién nacidos.
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