A consecuencia de la pandemia, la mitad de la fuerza laboral en Morelos puede sufrir del Síndrome Burnout o trabajador quemado, opinó el investigador de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), Arturo Juárez García; este padecimiento se manifiesta por estrés crónico, pérdida del interés, baja productividad, entre otras situaciones que pueden estar pasando desapercibidas, alertó.
“El Burnout o Síndrome del trabajador quemado es un efecto psicológico que ha llamado el interés de los expertos por las implicaciones que se tienen en la salud, en el desempeño de los empleados, incluso la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo reconoció como una alteración importante, pues es un síndrome de agotamiento crónico, indiferencia, sentimiento negativo y pobre productividad”.
Aunque poco se reconoce por parte de las empresas y los trabajadores, se puede identificar si de manera crónica la persona tiene falta de energía por varios días, falta de ánimo, sentimiento de frustración, ya no disfrutar de su trabajo “ya no importa si lo está haciendo bien o mal”, y la productividad laboral se reduce a una repuesta de estrés crónico, dijo el especialista.
Previo a la pandemia alrededor del 30 por ciento de los trabajadores y trabajadoras manifestaban sintomatología, para el confinamiento la tasa aumentó por lo menos 20 puntos porcentuales, por lo que en la actualidad este tipo de situaciones las enfrenta la mitad de la clase trabajadora.
La prevalencia en mujeres es más alta dado que además del empleo, tiene que hacer frente a dos o hasta tres roles como “atender a los hijos, tareas domésticas”, que les complican el desempeño laboral y las hacen más vulnerables.
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