Por tercer año, Emiliano Zapata realizó la feria del maíz, una exposición culinaria que representa un vínculo de los morelenses con la tierra y con platillos que forman parte de nuestro día a día.
La feria se realizó en la explanada del Zócalo y tuvo una afluencia de 25 mil personas aproximadamente, donde más de 30 locatarios sacaron a relucir sus productos derivados del cereal más consumido en México.
Los puestos de comida eran de lo más diverso: pozole, tacos, tamales, enchiladas, chilaquiles, tlacoyos, quesadillas, pay, panqués, nieves, elotes, esquites y galletas, por lo que era casi imposible decidirse dónde comer.
Durante todo el evento se presentó la banda sinfónica infantil y juvenil del estado de Morelos.
¡Pásele, pásele!
Con el “pásele pásele” a todo su esplendor, nos decidimos a probar un exquisito flan de elote que nos invitó a probar Leticia Bañón, comerciante que todos los fines de semana se dedica a vender tamales en el Zócalo, pero que esta vez presentó como su especialidad un flan de elote.
Platicó que lo preparaba con una base de queso philadelphia y leche condensada, el cual combinado con el elote le da un sabor único que ningún otro panqué tenía, al probarlo, todos los sabores estaban presentes.
Leticia Bañón no nos permitió irnos sin probar antes sus tamales, los cuales se destacaban por su masa con manteca y chile de árbol, que al ponerlos a escurrir le daban una consistencia un poco seca, pero también muy atinada en el sabor y la textura.
Por último, probamos la nieve de elote de Rosa Isela Flores, quien nos contó que la prepara a base de un licuado de elote con azúcar y lechera, la cual vierte en una garrafa para después dar vueltas durante una hora en sal y hielo, hasta que tome la consistencia de una nieve, un proceso bastante tradicional que da como resultado un sabor extraordinario.