Inesperadamente, la Brigada Nacional de Búsqueda (BNB) dio por terminada su segunda intervención en Morelos durante este jueves, a unos días de concluir los trabajos que habían proyectado hasta el 5 de diciembre.
El motivo fue la falta de seguridad durante los trabajos en campo que se realizaron en la mina de Mixtlalcingo, municipio de Yecapixtla, donde encontraron más fosas como lo habían previsto en la primera visita que hizo la BNB.
“En las inmediaciones de la mina se atrevieron a cometer un homicidio muy doloroso porque mataron a un joven a pocas calles de la mina, sin importarles y de día. Además todos los días se escuchaban disparos e incidentes de seguridad, no directamente a la Brigada, pero sí cercano”, aseveró Yadira González, encargada del eje de búsqueda en campo.
Esto, combinado con la disminución de seguridad preocupó a los brigadistas. En un principio cuando acudieron diputados, el alto comisionado de Naciones Unidas y el Fiscal de Morelos, tenían 35 elementos preventivos entre Sedena, Guardia Nacional y policías, mientras que este miércoles ya solo quedaban 14.
“En la segunda semana nos abandonó la Comisión Nacional de Búsqueda y se llevó al antropólogo que nos estaba ayudando y que estaba haciendo un excelente trabajo. También nos retiraron 15 elementos de seguridad con tres camionetas y armamento, lo que nos vulneró”, comentó Monserrat Castillo Portillo, vocera de la BNB.
También se llevaron dos perros adiestrados para el rastreo que ellos necesitaban, así que dieron por terminados los trabajos este miércoles dejando pendientes búsquedas en campo en los municipios de Amacuzac, Puente de Ixtla, Cuautla y Huitzilac.
En el primer municipio ubicado al sur de Morelos está uno de los ranchos de un presunto líder criminal, en donde se tienen datos de varias fosas clandestinas. Así que la Brigada planea volver a Morelos, pero con un nuevo formato.
Otra cosa que queda pendiente es que las autoridades rindan un informe de las acciones hechas en Mixtlalcingo, donde el eje en campo localizó siete cuerpos en la primera intervención y cuatro osamentas, tres de ellas completas en la segunda.
“La Fiscalía de Morelos no ha dado el informe desde la primera intervención y no vamos a quitar el dedo del renglón, necesitamos los datos de la Fiscalía y de las Comisiones de Búsqueda Nacional y local, que nos acompañaron, para tener claridad en sus procesos de exhumación porque no se nos permitió documentar”, dijo Monserrat.
Tiempo de espera
Haber encontrado fosas con cuerpos en Mixtlalcingo significó para los colectivos un avance positivo, pero las familias de Morelos que siguen buscando a sus desaparecidos tendrán que esperar más.
“Me siento triste porque sé que aquí en este estado podría estar enterrada mi hija en estos espacios. No pudimos llegar con esta fuerza a los otros municipios que teníamos ya plantados, sin embargo, no los vamos a dejar y vamos a continuar trabajando de la mano, las familias siempre vamos a seguir adelante”, dijo Tranquilina Hernández.
Ella es madre de Mireya Montiel Hernández, una jovencita que desapareció en 2012 en la colonia Antonio Barona de Cuernavaca. su caso es uno de los miles que existen en Morelos sin resolver y que podría seguir en la incertidumbre durante más tiempo, pues a su consideración, las autoridades siguen sin trabajar por cuenta propia para dar resultados.
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