La chuspata es un material que se origina a las orillas del lago de Pátzcuaro, en Michoacán, pero éste ha llegado a Cuautla en forma de artesanía, teniendo éxito entre los ciudadanos por su variedad de usos. Ahora, gracias a las manos de varios artesanos que la trabajan para hacer artículos productivos para la comunidad, se puede encontrar en La Heroica.
Javier Santiago, es originario de Michoacán y ahora radica en Cuautla, él trabaja de la chuspata desde hace años y ha aprendido a elaborar todo tipo de artículos desde tortilleros hasta casas para mascotas, lámparas, alcancías bolsas, canastas y hasta muebles como cajoneras.
Señaló que él vivió muchos años en Ihuatzio y por ello aprendió el manejo del material, sin embargo, esto se ha convertido en su trabajo principal y con él ha logrado recorrer parte del territorio mexicano.
Si bien dijo que este material es parecido al mimbre tiene su diferenciador, como la resistencia al agua y climas extremos como frío o calor y la durabilidad, pues un producto de chuspata pude llegar a durar más de 10 años con los cuidados óptimos.
Desde calentadores, tortilleros, bolsas, canastas, gateras, lámparas, hasta mesas, sillones o cajoneras se pueden elaborar, el tiempo varia pues va desde tres días en una pieza hasta más de 30 en un artículo más grande.
