La Ciudad de la Eterna Primavera es uno de los destinos predilectos por muchas personalidades para tener una casa de descanso o vivir de manera definitiva. Tal vez por su clima, su naturaleza o la cercanía con la Ciudad de México.
Artistas, escritores, músicos y políticos han elegido a Cuernavaca para construir grandes mansiones y casonas, sobre todo durante el siglo XX. Especialmente, los expresidentes de la República Mexicana, quienes tuvieron espectaculares residencias que hoy en día son lugares históricos en la ciudad.
Quinta Las Palmas, de Plutarco Elías Calles
Construida durante el sexenio del gobernador de Morelos, Vicente Estrada Cagijal, entre 1930 y 1934, está ubicada en la avenida Morelos esquina con calle Motolinía, en el Centro de Cuernavaca.
A pesar de ser un sitio histórico y una de las grandes casonas en Cuernavaca, hace más de 50 años fue demolida y se dio paso a la construcción de un supermercado comercial que aún permanece abierto.
En contraesquina de este inmueble se encuentra otra gran casona de Cuernavaca, conocida como Casa de la Chica, perteneciente a don Federico T. de La Chica.
"Subiendo por avenida Morelos a la altura de Motolinía es posible ver dos espectaculares casas de estilo colonial californiano, del lado derecho podemos ver la casa de Don Federico T. de la Chica, una espectacular mansión rodeada por un gran jardín y frondosos árboles", contó el arquitecto Fernando Lezama, cronista de Cuernavaca.
Desde su visión de arquitecto, Fernando Lezama comenta que estas propiedades nos reflejan un estilo de arquitectura que pocas veces se observa en la ciudad.
"Dichas propiedades tienen la característica de estar construidas en lo que en los años veinte se consideraba la periferia, ya que hasta allí se terminaba la ciudad en su extremo sur, estas edificaciones buscaban extender su vista hacia el exterior integrando grandes ventanales, terrazas y hasta los clásicos miradores que podemos ver en las edificaciones típicas de la ciudad", explicó.
Los Belenes, de Luis Echeverría
Ubicada en calle Coronel Ahumada número 413, colonia Los Volcanes, esta casona abarca más de 18 mil metros cuadrados con un jardín maravilloso que alberga una diversidad de plantas nativas y exóticas.
Luis Echeverría vivió gran tiempo en esta casa, y en septiembre de 1974, decidió donar este inmueble a la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), convirtiéndose en el Centro Universitario Los Belenes.
Finca Palmira, de Lázaro Cárdenas
De acuerdo con la información del cronista Carlos Lavín en su página oficial, "fue en 1931 cuando Lázaro Cárdenas adquiere los terrenos para su rancho al que nombró Tinguindin, y en 1933 construyó Palmira como su casa de descanso".
Asimismo, la describe como una casona con gruesos muros de tabique, madera y teja, con altos espacios y rodeada por una hermosa terraza, grandes jardines, una espectacular alberca y árboles frutales de muchas variedades.
Se destaca que en este lugar, se ubica un despacho en el cual se tiene registro que fue firmada la Expropiación Petrolera. Tiempo después, Lázaro Cárdenas donó parte de sus terrenos para la creación de la Escuela Normal Rural para Señoritas, conocida como Escuela Secundaria Técnica No. 1 Internado Palmira.
La periodista y cronista Lya Gutiérrez Quintanilla escribe que "en 1943 se hizo la donación a través de la Beneficencia Pública y en 1944, inicia ya de manera oficial la Escuela Normal Rural Lázaro Cárdenas del Río de Palmira".
Después de mucho tiempo de mantenerse en el abandono se buscó rescatar este sitio y convertirlo en un espacio público y centro cultural en beneficio de la sociedad morelense.
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