Anuncia AMLO el fin de la corrupción política

Afirma que inicia nueva etapa sin perseguir a nadie porque no se apuesta "al circo ni a la simulación"

Daniel Martínez

  · sábado 1 de diciembre de 2018

Los aumentos al salario mínimo no volverán a fijarse por debajo de la inflación como llegó a suceder en el periodo neoliberal / Cortesía

“Haré cuanto pueda para obstaculizar las regresiones en las que conservadores y corruptos estarán empeñados”, sentenció Andrés Manuel López Obrador durante su discurso después de ser investido como presidente de México, acto en el que anunció el fin de la corrupción política y refrendó su propuesta de “borrón y cuenta nueva”, con la que se evitaría procesar a quienes hayan cometido actos irregulares durante lo que llamó “el período neoliberal”, por lo que “al contrario de lo que pudiera suponerse, esta nueva etapa la vamos a iniciar sin perseguir a nadie porque no apostamos al circo ni a la simulación”.

López Obrador afirmó que de perseguirse a los corruptos de sexenios anteriores, no se limitaría a la búsqueda de chivos expiatorios, y que se procesaría también a los altos mandos públicos y privados que la hayan cometido, por lo que no habría espacio en las cárceles, además, advirtió:

Meteríamos al país en una dinámica de fractura, conflicto y confrontación, y ello nos llevaría a consumir tiempo, energía y recursos que necesitamos para emprender la regeneración verdadera y radical de la vida pública de México, la construcción de una nueva patria, la reactivación económica y la pacificación del país.

Llamó a “las autoridades encargadas a desahogar en absoluta libertad los asuntos pendientes”, como los abusos de autoridad y el caso Ayotzinapa que serán atendidos por una comisión de la verdad; “que se castigue a los que resulten responsables, pero que la Presidencia se abstenga de solicitar investigaciones en contra de los que han ocupado cargos públicos o se hayan dedicado a hacer negocios al amparo del poder durante el período neoliberal”; y afirmó que resultará mucho más severa y eficaz la condena a ese régimen “dejar en claro su manifiesto fracaso y su evidente corrupción, y hacer todo lo que podamos para abolir el régimen neoliberal”.

Y advirtió que esa propuesta de no persecución aplicará sólo hasta el período presidencial de Enrique Peña Nieto, que terminó este viernes:

Tal determinación se aplicará para los de antes y para los que se van, no para nosotros, quienes mantendremos en alto el ideal y la práctica de la honestidad. Empiezo por informar que hemos promovido una ley para convertir la corrupción en delito grave, que aunque parezca increíble no lo era. Con apego a mis convicciones y en uso de mis facultades, me comprometo a no robar y a no permitir que nadie se aproveche de su cargo o posición para sustraer bienes del erario o hacer negocios al amparo del poder público, esto aplica para amigos, compañeros de lucha y familiares, abundó.

Al esbozar algunas de las acciones que se propone en la administración que hoy inicia, López Obrador afirmó que no permitirá la práctica del fracking, para la extracción de petróleo y gas natural, ni el uso de cultivos transgénicos. “Vamos a impulsar proyectos productivos con inversión pública y privada, nacional y extranjera. Estos proyectos se crearán como cortinas de desarrollo de Sur a Norte del país, para retener a los mexicanos en sus lugares de origen. Queremos que la migración sea optativa, no obligatoria. Vamos a lograr que los mexicanos tengan trabajo, prosperen y sean felices donde nacieron, donde están sus familiares, sus costumbres y sus culturas”, aseveró antes de referirse a la construcción del Tren Maya, el Tren del Istmo de Tehuantepec, y aseguró:

En tres años estará funcionando –me canso ganso- además del actual, el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, con dos pistas adicionales en la Base Aérea de Santa Lucía.

Advirtió que estos proyectos como el resto de su Gobierno, se ajustará a la disciplina fiscal y a la austeridad, por lo que no se recurrirá al endeudamiento, y reiteró que respetará la autonomía del Banco de México.

No gastaremos más de lo que ingrese a la Hacienda Pública. Se respetarán los contratos suscritos por los gobiernos anteriores, pero ya no habrá más corrupción ni influyentismo en negociaciones con empresas particulares.

También se comprometió "a que las inversiones de accionistas nacionales y extranjeros estarán seguras y se crearán condiciones hasta para obtener buenos rendimientos, porque en México habrá honestidad, Estado de Derecho, reglas claras, crecimiento económico y habrá confianza”.

López Obrador afirmó que:

El Estado se ocupará de disminuir las desigualdades sociales, no se seguirá desplazando a la justicia social de la agenda del gobierno. No se condenará a quienes nacen pobres a morir pobres, subrayó al reiterar que los programas sociales se reforzarán y en su distribución se eliminarán los intermediarios.

Hoy presento formalmente a este Congreso reformas constitucionales, proyectos de reforma a la Constitución, para establecer el estado de bienestar y garantizar el derecho del pueblo a la salud, la educación y a la seguridad social, anunció.

Los aumentos al salario mínimo no volverán a fijarse por debajo de la inflación como llegó a suceder en el periodo neoliberal. Dos millones 300 mil jóvenes serán contratados para trabajar como aprendices en talleres, empresas, comercios y diversas labores productivas o sociales, y se les pagará un salario mientras se van capacitando de tres mil 600 pesos mensuales. Ya no va a haber ni-nis. No se va a dar la espalda a los jóvenes ni se les va a ofender llamándoles de esa manera, porque no es culpa de ellos que no tengan oportunidad de trabajo y de estudio”, anunció.

Igualmente reiteró que se cancelará la reforma educativa y se otorgarán 10 millones de becas a estudiantes en todos los niveles de escolaridad, se crearán 100 universidades públicas, se fomentará el deporte y las actividades artísticas, la ciencia y la tecnología.