La pandemia que enfrenta el país dejó sin trabajo a los artistas circenses, quienes se han visto obligados a botear en cruceros y mercados de la entidad, mientras que otros abandonaron el arte de hacer reír para buscar un oficio que les dé un sustento a ellos y a sus familias.
Con la emergencia sanitaria, las actividades y eventos de estos artistas fueron cancelados, lo que los dejó sin posibilidad de algún ingreso, refirió Termómetro superpayaso, quien, junto a un grupo de compañeros de la agrupación Payamor, acudió ayer al mercado de Ciudad Chapultepec, en Cuernavca, para llevar un poco de alegría a comerciantes y clientes.
Como una manera de recaudar dinero, realizan un pequeño show en los mercados y cruceros, mientras que la ciudadanía y comerciantes les ayudan con una moneda o con algún productgo de la canasta básica. Y es que, pese a que desde el lunes el estado se encuentra en semáforo amarillo, aún no pueden reincorporarse a sus actividades, ya que siguen suspendidos los circos y las actividades sociales, como las fiestas.
Ante la falta de apoyo y la necesidad de recursos para poder susbsistir, muchos abandonaron la actividad de payasos para buscar empleos de herrería, plomería y carpintería; otros optaron por regresar a sus ciudades de origen.