La colonia Miguel López de Nava, ubicada en la entrada norte de Jonacatepec, atraviesa por una crisis de agua debido a que se secaron la mayoría de los pozos de las casi 300 casas que componen esta comunidad.
El ayudante municipal Valerio Mejía Torres indicó que este miércoles 8 de mayo se alcanzó la temperatura más alta en su comunidad, al llegar a los 38 grados, una temperatura que no recuerda haberse registrado, lo que viene a agravar aún más la falta del agua.
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"Desafortunadamente el calor está en su apogeo y nosotros sin agua, esto se debe a que los pozos que se tienen en cada uno de los domicilios prácticamente se están secando, antes en esta zona quien construía un pozo encontraba agua a los cinco o seis metros, pero ahora ni rascando 20 metros se encuentra, lo que viene a darnos el aviso de que el agua se está acabando", comentó Mejía Torres.
Informó que en la colonia Miguel López de Nava carecen de tubería hidráulica, por lo que en cada domicilio tienen pozos para tener agua. Sin embargo en esta temporada de estiaje el nivel del agua disminuyó, incluso algunos ya no tienen agua, por lo que tuvieron qué apoyar a los hogares con el servicio de pipas.
Mejía Torres explicó que otro problema de los habitantes es que la mayoría no cuentan con cisternas para el almacenamiento de agua, por lo que las cubetas, tinas, botes y otros recipientes, resultan insuficientes para tener agua por varios días.
"Como todos en la comunidad tenemos pozo, nadie tiene cisternas para almacenar el agua y ese problema genera que no se puedan almacenar mucha agua por lo que una pipa la tenemos que destinar para varias familias, entre cuatro y cinco, por no tener dónde más almacenarla".
Dan a los ciudadanos agua de Las Pilas
Mejía Torres señaló que el agua que se les dota a los ciudadanos es tomada de los manantiales de Las Pilas, un lugar que se ubica una zona arqueológica importante de la región y donde también se encuentra ubicado un balneario que lleva el mismo nombre.
"El agua de Las Pilas es limpia y de ahí es donde estamos haciendo distribución a los hogares, son alrededor de 300 quienes necesitan del agua para realizar sus necesidades básicas, desde el aseo personal hasta lavar los trastes", dio a conocer Mejía Torres.
Puntualizó que al ser agua cristalina y limpia, "es apta para el consumo humano, por lo que la mayoría de la gente almacena el líquido en tambos que pueden ser sellados para evitar su contaminación".
