[Especial] Grietas físicas, emocionales y económicas

Tras el terremoto, los comerciantes señalan que vivieron un periodo de escasez en las ventas

Maritza Cuevas

  · jueves 19 de septiembre de 2019

El mural de semillas sigue es un fuerte turístico para el municipio, pues cada año tiene un diseño diferente/Fotos: Mariana García

“El miedo, la frustración en el momento, los niños en la escuela y querer correr por ellos, fue realmente algo impactante y trágico para todos; en ese momento nos olvidamos de los comercios y salimos corriendo a buscarlos”, recordó Betzabé Sánchez Gómez, comerciante de Tepoztlán.

El pueblo mágico de Tepoztlán es uno de los municipios con mayores tradiciones en Morelos, además de ser uno de los principales puntos turísticos más importantes a nivel nacional. Tras el sismo del 19S se vio totalmente afectado en el aspecto turístico, económico y cultural.

Después del sismo, en Tepoztlán fueron cerrados la Iglesia de la Natividad, el Museo del Ex Convento y la Zona Arqueológica donde se localiza la Pirámide del Tepozteco, algo que afectó totalmente al comercio y la economía del municipio por la falta de turismo.

Para todos fue una situación trágica, no solamente porque nuestras estructuras, templos y casas se vieron dañadas; también el comercio porque el turismo no acudía y nuestra economía se vio afectada, fueron varios meses que esto estuvo totalmente vacío

Betzabé Sánchez.

Se estima que aproximadamente el 85 por ciento de la población en Tepoztlán depende del turismo directa e indirectamente, por lo que el sismo trajo problemas económicos a los comerciantes.

De por si las ventas no estaban muy bien y cuando fue el sismo, bajaron aún más, al cerrar sitios tan importantes por las afectaciones y la falta de turismo no hubo fluidez económica. Al otro día del sismo, yo acudí a abrir el negocio pero por supuesto no había ventas Javier Carillo, comerciante de Tepoztlán.

El Ex Convento de La Natividad, uno de los más importantes y representativos de México, desafortunadamente fue una de las estructuras que sufrió diversos daños como grietas y fracturas, dejando heridas no sólo en el inmueble, sino en la cultura, las tradiciones religiosas y el turismo.

Son templos muy antiguos y se vieron afectadas las tradiciones porque las fiestas no se pueden celebrar en la parroquia, ya que está totalmente afectada. Como creyente católico nos duele mucho porque forma parte de nuestra creencia y cultura, y es doloroso ver los edificios derrumbados. Incluso como creyentes pensamos en los grandes avisos que vienen dentro de la cuestión bíblica y que es parte del final de los tiempos y el apocalipsis. Pero también entendemos que es una cuestión natural y algo inevitable

Betzabé Sánchez.

Al ver que los trabajos de reconstrucción serían muy lentos y sin apoyo del INAH, los pobladores se unieron para construir una capilla temporal y realizar las misas y festividades correspondientes ahí.

“El INAH no quería hacer la capilla, pero para la gente del pueblo la iglesia representa algo muy importante, por lo que se unieron y a través de conseguir recursos con kermeses, apoyo de la población y del turismo, lograron hacer la capilla siete meses después del sismo”, mencionó Javier Carillo.

Cada 8 de septiembre, se celebra la Fiesta Patronal de Nuestra Señora de la Natividad de María, tradición que se ha visto afectada con el cierre de la iglesia, sin embargo, una de las costumbres que continúa es el cambio del arco de semillas, obra de arte que sigue atrayendo al turismo.

“A la gente que acude a visitar Tepoztlán, ya no le interesa entrar al ex convento desde el momento que ven que está fracturado, pero afortunadamente Tepoztlán se rige por muchas tradiciones y una de ellas es su Arco de semillas, a pesar de que el convento está dañado, el arco se cambia cada año; se hace un diseño totalmente original, mucha gente se reúne a pegar semillas y se crea una verdadera obra de arte y eso ayuda a que la gente siga visitando al menos ese espacio”, comentó Betzabé Sánchez.

El sismo trajo muchos desastres, tristezas y días grises en Tepoztlán, pero también se demostró la solidaridad y la unión que caracteriza a los pobladores, al movilizarse de inmediato y apoyar a las personas que habían sufrido pérdidas y afectaciones graves.