La fibromialgia es un padecimiento que, a pesar de ser incapacitante, no está reconocido en México en el cuadro de enfermedades, por lo que su tratamiento es difícil y las autoridades laborales y empresas no la reconocen para otorgar incapacidades laborales, acusó Guadalupe Rivero, de Mujeres Unidas contra la Fibromialgia.
Al término de la rueda de prensa, se anunció que la ceremonia cívica del Ejército mexicano: abanderamiento e incineración de la Bandera de México, que se realizará al alimón con el Ayuntamiento de Cuernavaca y la 24ª Zona Militar, servirá para también para hacer difusión y conciencia sobre el padecimiento que podría afectar hasta al cuatro por ciento de la población.
La enfermedad, que afecta en 90 por ciento a mujeres, no es atendida por los servicios de salud al no estar en el cuadro de enfermedades, y a menudo es confundida y tratada como artritis o reuma, lo que impide que los pacientes tengan una atención profesional oportuna.
Agregó que la negativa de muchos médicos a reconocer a la fibromialgia como una enfermedad, provoca también que la sociedad civil tenga un total desconocimiento sobre el padecimiento.
Además, expuso que el mal puede auto diagnosticarse a partir de la identificación de 10 de los 18 puntos de dolor musculo-esquelético que ha identificado la Organización Mundial de la Salud: detrás del cuello, a la altura de los hombros, detrás de las coderas, en los glúteos, en los muslos, y detrás de las rodillas, la duración del dolor es de tres a cuatro meses y durante ese tiempo debe llevarse registro de las partes del cuerpo que sufren dolor; los dolores se incrementan con el frío y en caso de depresión.
La fibromialgia es un padecimiento asociado con el estrés y puede ser detonada por pérdidas afectivas, o situaciones que alteren el ritmo de vida, explicó al revelar que el distrés –estrés con dolor-, es detonante de la fibromialgia y que los dolores son incapacitantes, por lo que actualmente su organización dialoga con la Secretaría del Trabajo en el plano federal para solicitar que en caso de diagnóstico de fibromialgia por un médico privado –ya que el sector público no la reconoce como padecimiento- se autoricen los días de incapacidad.