Más de la mitad de los incendios forestales ocurridos en Morelos han sido ocasionados por actividades ilegales, entre ellas la tala clandestina y el cambio de uso de suelo, según el concentrado de la Secretaría de Desarrollo Sustentable, desde donde se sabe las incidencias tiene un disminución de 55 por ciento comparado con el año pasado.
Al corte del primero de marzo la dependencia contabilizó 19 incendios forestales para la temporada 2023, de estos, un 100% fueron ocasionados por la mano del hombre; 12, es decir, un 63% fueron por tala ilegal (siete), y cambio de uso de suelo (cinco), que en el caso de estos últimos, tiene que ver con la venta del terreno para construcción.
En total cinco tuvieron que ver con la quema del terreno para la preparación de la siembra, pero se salió del control dañando zonas que no estaban consideradas; 1 más originado por una fogata, y uno la causa fue desconocida.
En el municipio de Huitzilac ocurrió la mayoría de ellos con un total de seis, en Tepoztlán cinco, Yautepec dos, Cuernavaca dos; en Jiutepec, Tetela del Volcán, Atlatlahucan, y Emiliano Zapata, uno cada uno. La superficie más afectada fue en Tepoztlán cuya superficie afectada fue de 176 hectáreas, de un total de 203 hectáreas en todo el territorio morelense.
El Corredor Biológico Chichinautzin es hasta ahora el de mayor afectación con 151 hectáreas, seguido de las Lagunas de Zempoala, Sierra de Montenegro, y El Tepozteco. Según los tiempos de detección, el promedio fue de 17 minutos, y el control de los mismo tuvo una duración máxima de 3 horas con 15 minutos.
Un 84 por ciento de lo consumido era de tipo arbustivo, un 78 por ciento hierbas, y un 40 por ciento hojarasca, detalla la dependencia, quien resalta que en el combate han participado 334 brigadistas y tres voluntarios.
