Tras la entrega de las aulas móviles que ocupaba la escuela Gabino Barreda, la Casa de Cultura de Cuautla inició una nueva etapa que se caracterizará por la ampliación de su oferta cultural, pero también por nuevas necesidades, entre ellas la falta de mobiliario adecuado y labores constantes de limpieza, por lo que el patronato que está a cargo del complejo convocó a la ciudadanía a sumarse a las faenas que se realizan cada fin de semana y donar sillas para las aulas.
"No solo hemos expandido nuestras instalaciones al triple, sino que también invitamos a la comunidad a poseer y mejorar su Casa de Cultura", dijo Juan Barrales Tanus, presidente del Patronato de la Casa de Cultura de Cuautla, quien consideró importante equipar los nuevos salones y espacios para talleres y teatro con el apoyo de la sociedad civil.
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La invitación se extendió a contribuir no sólo con la donación de sillas, sino a acudir a las faenas que se realizan cada fin de semana.
"Esto es de todos nosotros. Como patronato, simplemente somos custodios de un bien que es de todos", dijo el presidente de la asociación civil, cuyo origen se remonta a 1956.
El patronato busca adquirir mobiliario resistente y accesible, específicamente sillas tipo "for life", según expuso Barrales, las cuales se pueden adquirir a alrededor de 300 pesos:
"Son sillas macizas y duraderas, ideales para nuestras aulas", dijo, y detalló que la invitación también considera la posibilidad de donar instrumentos musicales, como pianos, violines y trompetas, los cuales serán utilizados por niños y jóvenes en formación artística.
"Tenemos maestros verdaderamente talentosos", dijo.
Con la donación de las aulas temporales, que fueron ocupadas por los estudiantes tras el sismo del 19 de septiembre de 2017, Barrales aseguró que hoy la de Cuautla es la Casa de Cultura más grande de Morelos.
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