Después de cinco años de permanecer cerrada, la parroquia de San Pedro de Verona Mártir en Casasano, inició formalmente con su remodelación. Se prevé que esta semana reanuden las misas al interior del templo.
Esta parroquia ubicada en el corazón del poblado de Casasano registró graves daños estructurales con el sismo del 19 de septiembre del 2017, como medida de prevención tuvo que cerrar sus puertas al público, pero el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se encargó de reparar el deterioro en el templo durante tres años, actualmente ya es considerado un lugar seguro.
Este siete de febrero el párroco, Héctor Rodríguez Campuzano convocó a la población a sumarse a las actividades de limpieza, acomodo y acarreo, para abrir sus puertas nuevamente, dichas acciones se acordaron por la comunidad en asambleas previas.
Faustino Quiroz Pineda, diácono permanente de la Diócesis de Cuernavaca asignado a la parroquia de San Pedro de Verona Mártir, compartió que el objetivo es tener lista la iglesia para poder celebrar los eventos religioso que se avecinan, como lo es, la semana santa, además, ya no podrán utilizar el auditorio ejidal de Casasano como sede alterna a la iglesia.
La parroquia está próxima a cumplir 300 años, su construcción inició un 29 de abril de 1723 en torno a la hacienda de Casasano y la producción azucarera, para que los hacendados tuvieran un templo religioso cercano.
El miércoles ocho de febrero se dará pie al traslado de imágenes religiosas, bancas y todo el inmueble que pertenece a la Iglesia, para inaugurarla con una misa, el fin de semana.
➡️ ¿Ya recibes las noticias en WhatsApp? ¡ES GRATIS!
Únete a nuestro canal de YouTube
