El destino del antiguo Teatro Aurora es incierto. Situado en Yautepec, este recinto en ruinas fue testigo de la erección de Morelos en 1869, al constituirse como la sede de la primera Legislatura de la entidad. En su interior se llevaron a cabo importantes actos políticos de la época y, de acuerdo con el historiador Gustavo Garibay, también fue el lugar donde la emblemática actriz Virginia Fábregas incursionó en la actuación.
“El espacio sigue ahí prácticamente en el abandono, porque además hay restricciones para su uso comercial; hay algunos locales y es una vecindad donde se arrendan algunos espacios para la gente, pero el inmueble no se puede intervenir en términos arquitectónicos, porque está catalogado como un recinto histórico”, explica Garibay.
Antes de los actos conmemorativos por el bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución, en 2010, un grupo de representantes ciudadanos de Yautepec, encabezados por el cronista César Ortiz Triana, elaboró una propuesta para recuperar este espacio y darle un destino cultural. Sin embargo, ni esa propuesta, ni las que se han realizado con anterioridad han generado un plan efectivo por parte de las autoridades.
Además, estos planes se enfrentan a una limitante:
El lugar aún es propiedad de la familia Mendoza, cuyos integrantes han mostrado disposición a contribuir en la recuperación del recinto histórico, pero nunca fueran indemnizados luego de que el proceso de expropiación iniciara en la década de 1980, en tiempos del gobernador Lauro Ortega. “El problema es que nunca se liquidó o indemnizó a la familia, y eso dejó inactivo el decreto”, refiere el historiador.
De acuerdo con Gustavo Garibay, las ruinas del Teatro Aurora podrían convertirse en la sede del Centro Estatal de Documentación, en un recinto para la memoria de Yautepec o un museo histórico, debido a que el municipio carece de esas instalaciones.
