En la homilía dominical, el obispo Ramón Castro Castro solicitó a Dios fortalezca y acompañe a los familiares de Jessica Cerón y Viridiana Morales, quienes desde hace siete años desconocen el paradero de las jóvenes; recordó a los fieles que son administradores de la vida y tendrán que rendir cuentas ante Dios sobre los hechos realizados en su vida en la tierra, sobre el amor y el servicio, el cual debe ser activo sirviendo a sus hermanos.
Señaló que la vida no es absolutamente nuestra, el único dueño absoluto de la vida es Dios, siendo los laicos únicamente administradores de la vida.
Uno percibe tanta soberbia, tanto orgullo en tantos corazones humanos que se sienten absolutos de la vida y se les olvida que son solo administradores y a un administrador se le piden cuentas y bien claro que habrá un juicio dirigido por el amor, pero también por la justicia y Dios va a pedir cuentas de sus vidas.
En este sentido, monseñor aseveró que tener en cuenta este hecho ayudará a crecer positivamente en el servicio a los demás, un servicio desinteresado que dará como resultado buenas cuentas de la vida, ya sean padres sobre su misma familia; un obispo dará cuentas de cómo trabajo con su grey; un hijo dará cuentas de sus padres y hermanos; y hasta políticos, magistrados y jueces donde habrá justicia divina para todos.
Detalló que la confianza en Dios y vigilancia a la vida son las correctas actitudes para manejar con bien la administración.
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