Estudiantes del primer semestre de pedagogía de la Universidad Privada del Estado de Morelos (UPEM), en el municipio de Cuautla, han salido a las calles para recaudar fondos para comprar alimentos que serán donados a los familiares de los pacientes que se encuentran internados en algunos de los principales hospitales que hay en la ciudad, entre ellos el Hospital General "Mauro Belaunzarán Tapia", la clínica "Rafael Barba Ocampo" del ISSSTE y el Hospital General de Zona No. 7 del IMSS.
Así lo dieron a conocer Samantha Carrillo y David Álvarez, quienes detallaron que la colecta inició el pasado 12 de septiembre y culminará el día 30. Durante dos semanas, cerca de 30 jóvenes han salido y seguirán saliendo a las calles del municipio, así como a sus principales plazas y mercados, portando un bote en el que recolectan las donaciones de los ciudadanos. Sin embargo, se han encontrado con apatía y desconfianza, ya que hay personas que no quieren donar.
"Hay gente que nos dice que no quiere, yo creo que por lo mismo de que a veces se malinterpretan las cosas y hay jóvenes que no lo ocupan para esoz llega a haber la desconfianza, pero esperamos llevar la comida y hacer un pequeño video o reportaje donde se muestre que lo estamos entregando", dijo la estudiante.
La Plaza y Fuerte de Galeana, la antigua estación del ferrocarril interoceánico, el zócalo y el mercado nuevo son algunos de los espacios que han sido recorridos por los estudiantes, además de los planteles de otras escuelas del municipio.
"Las personas tienen gastos en el hospital y apoyarles en una noche con comida o un desayuno les ayuda demasiado", explicó David.
Si bien la colecta terminará el 30 de septiembre, los alumnos esperan poder entregar los alimentos durante la primera semana de octubre y fortalecer la campaña en el transcurso de los próximos días, con el apoyo de los ciudadanos que quieran sumarse la causa.
"Posteriormente seguiremos con la misma rutina, llevando comida a las personas en otras ocasiones", agregó Samantha.
En el Hospital General de Cuautla, llevar alimentos a los familiares de pacientes internados se ha convertido en una práctica recurrente para asociaciones civiles, grupos organizados y fieles católicos, que acuden durante el día y la noche como muestra de apoyo a esas personas. Al llegar, uno de ellos ingresa al hospital invitando a las personas a salir a la calle para comer.
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