/ martes 20 de noviembre de 2018

La 4T en Morelos

Andrés Manuel López Obrador ha dicho que, con él, “México vivirá su cuarta transformación”, enumerando las etapas de nuestra gesta de independencia, la época de la reforma, la revolución (que conmemoramos el pasado 20 de noviembre) y ahora, la que encabezará junto con el pueblo sabio, con las benditas redes sociales, donde estarán primero los pobres y se acabará la corrupción, por encima de los fifís. Todo eso, si las encuestas así lo avalan. Y esperamos, sin logos piratas como el de Claudia Sheinbaum e la capital del país.

Lo que preocupa es la polarización social que el estilo de pre gobernar de AMLO ha generado, con signos de autoritarismo, populismo y otros ismos. Baste ver la similitud entre el Sr. López y los mensajes de otros dos personajes que llegaron al poder con inmensas expectativas, como factor de cambio, de esperanza y luego se convirtieron en la antítesis de lo que un gobernante debe ser. La comparación es esta: López Obrador dijo: “Mi amo es el pueblo de México…yo ya no me pertenezco, estoy al servicio de la nación, soy un hombre de la nación. Entonces, tengo que cumplirle al pueblo de México, es mi responsabilidad no fallarle y no le voy a fallar “.

Hugo Chávez dijo lo mismo a los venezolanos: "Yo no me pertenezco, yo le pertenezco al pueblo de Venezuela. Mi vida es de ustedes. ¿Qué me queda a mí? Servir al pueblo, servir a la revolución, servir al socialismo, servirle a la patria". Era 2009, y lo dijo desde el Balcón del Pueblo, cuando celebraba su triunfo como presidente de la república bolivariana. Pero hay un antecedente más, el de Adolfo Hitler, quien en 1931, al frente del partido nacional socialista (Nazi) dijo a los alemanes. "Ahora soy totalmente libre, interior y exteriormente. Tal vez tenía que ser así. Ahora ya sólo pertenezco al pueblo alemán y a mi deber" Que conste que esto no lo digo yo: lo dice la historia.

Y la historia de nuestro joven estado, también comienza a vivir su Cuarta Transformación (4T), esto si consideramos las tres anteriores, con gobiernos emanados del 1) PRI 2) PAN 3) PRD y ahora 4) Un híbrido nacido de la coalición Juntos Haremos Historia (Morena-PES-PT) pero que ahora es básicamente México Blanco &Co un gobierno “ciudadano”, de alguien que “no es político” “que no va a fallar” y al que “no dejaron gobernar”. Pues ¿qué creen? Ya son gobierno, con lo que esto implica.

Y como prometer no empobrece, ya esbozaron diversos proyectos, (nada nuevos, por cierto) para modernizar a Morelos. Hablaron de reactivar el aeropuerto Mariano Matamoros (lo que no ha sido posible en tres sexenios); se anunció un tren regional que conectaría a Morelos con la Ciudad de México (que ni el Estado de México logró, pese a ser cuna presidencial, sede el grupo Atracomucho y tener un mega presupuesto anual), además de que las empresas están ciscadas por la cancelación del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAIM).

Se enunció (para ser benévolos) una central de autobuses magna y funcional (una demanda social urgente a la que nadie la ha entrado) y un edificio digno de Protección Civil que albergará y dignificará a los bomberos y servicios de emergencias. Ojalá. Pero lo que más llamó la atención, fue la especie de que se construirá el libramiento circunvalación respetando el entorno natural, atacando de fondo los problemas heredados por el paso exprés. Ya existía el proyecto del Libramiento Norponiente, que mutó a un posible segundo piso del libramiento de Cuernavaca y que degeneró en el Paso Estrés o Paso de la Muerte.

A ver qué dicen los grupos ecologistas (ya ven lo de la ampliación de la autopista La Pera-Cuautla) y otros grupos sociales, inconformes, por ejemplo, con el costo del peaje de otra super vía, la Carretera Siglo XXI Jantetelco-El Higuerón a 179 pesos. Un insulto. Por más tiempo que te ahorres. El gobernador no ha dicho nada. Ni tampoco Cuauhtémoc, y eso que los diputados locales ya habían hecho pública su petición de que desaparezcan diversas casetas de peaje que sangran la economía del estado. ¡Ah! También se declaró que se reubicará el monumento a Zapata, y habrá un monumento emblemático de Morelos “que nos dará identidad”. A ver si no sale como la Estela de Luz.

Blanco Bravo manifestó que se restablecerán la seguridad y paz social, pero siendo noviembre el mes más violento del año, el Almirante José Antonio Ortiz Guarneros ya comenzó a sentir la presión y ante reclamos sociales y petición de su salida por empresarios debido a la inseguridad, declaro que “su renuncia depende de la decisión del gobernador Blanco”, quien ya dijo que no se va. Así de grave, y apenas a mes y medio de asumir el poder. Total, que como se aprecia, no es lo mismo ser borracho a ser cantinero. Ni las transformaciones se dan por decreto, declaraciones, justificaciones o manotazos.

Pensemos en Edgar Degas, quien aseguró: “Es bueno copiar lo que se ve, pero es mucho mejor pintar lo que queda en nuestra memoria después de ver algo. Se trata de una transformación en donde la imaginación y la memoria trabajan juntas. Sólo se puede reproducir algo que nos golpeó, es decir, sólo lo esencial”.

Hasta la próxima entrega, donde podrán seguir leyendo lo que hay en mi mente.

Comentarios: cfelix7@hotmail.com Twitter: @CarlosFelix1


Andrés Manuel López Obrador ha dicho que, con él, “México vivirá su cuarta transformación”, enumerando las etapas de nuestra gesta de independencia, la época de la reforma, la revolución (que conmemoramos el pasado 20 de noviembre) y ahora, la que encabezará junto con el pueblo sabio, con las benditas redes sociales, donde estarán primero los pobres y se acabará la corrupción, por encima de los fifís. Todo eso, si las encuestas así lo avalan. Y esperamos, sin logos piratas como el de Claudia Sheinbaum e la capital del país.

Lo que preocupa es la polarización social que el estilo de pre gobernar de AMLO ha generado, con signos de autoritarismo, populismo y otros ismos. Baste ver la similitud entre el Sr. López y los mensajes de otros dos personajes que llegaron al poder con inmensas expectativas, como factor de cambio, de esperanza y luego se convirtieron en la antítesis de lo que un gobernante debe ser. La comparación es esta: López Obrador dijo: “Mi amo es el pueblo de México…yo ya no me pertenezco, estoy al servicio de la nación, soy un hombre de la nación. Entonces, tengo que cumplirle al pueblo de México, es mi responsabilidad no fallarle y no le voy a fallar “.

Hugo Chávez dijo lo mismo a los venezolanos: "Yo no me pertenezco, yo le pertenezco al pueblo de Venezuela. Mi vida es de ustedes. ¿Qué me queda a mí? Servir al pueblo, servir a la revolución, servir al socialismo, servirle a la patria". Era 2009, y lo dijo desde el Balcón del Pueblo, cuando celebraba su triunfo como presidente de la república bolivariana. Pero hay un antecedente más, el de Adolfo Hitler, quien en 1931, al frente del partido nacional socialista (Nazi) dijo a los alemanes. "Ahora soy totalmente libre, interior y exteriormente. Tal vez tenía que ser así. Ahora ya sólo pertenezco al pueblo alemán y a mi deber" Que conste que esto no lo digo yo: lo dice la historia.

Y la historia de nuestro joven estado, también comienza a vivir su Cuarta Transformación (4T), esto si consideramos las tres anteriores, con gobiernos emanados del 1) PRI 2) PAN 3) PRD y ahora 4) Un híbrido nacido de la coalición Juntos Haremos Historia (Morena-PES-PT) pero que ahora es básicamente México Blanco &Co un gobierno “ciudadano”, de alguien que “no es político” “que no va a fallar” y al que “no dejaron gobernar”. Pues ¿qué creen? Ya son gobierno, con lo que esto implica.

Y como prometer no empobrece, ya esbozaron diversos proyectos, (nada nuevos, por cierto) para modernizar a Morelos. Hablaron de reactivar el aeropuerto Mariano Matamoros (lo que no ha sido posible en tres sexenios); se anunció un tren regional que conectaría a Morelos con la Ciudad de México (que ni el Estado de México logró, pese a ser cuna presidencial, sede el grupo Atracomucho y tener un mega presupuesto anual), además de que las empresas están ciscadas por la cancelación del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAIM).

Se enunció (para ser benévolos) una central de autobuses magna y funcional (una demanda social urgente a la que nadie la ha entrado) y un edificio digno de Protección Civil que albergará y dignificará a los bomberos y servicios de emergencias. Ojalá. Pero lo que más llamó la atención, fue la especie de que se construirá el libramiento circunvalación respetando el entorno natural, atacando de fondo los problemas heredados por el paso exprés. Ya existía el proyecto del Libramiento Norponiente, que mutó a un posible segundo piso del libramiento de Cuernavaca y que degeneró en el Paso Estrés o Paso de la Muerte.

A ver qué dicen los grupos ecologistas (ya ven lo de la ampliación de la autopista La Pera-Cuautla) y otros grupos sociales, inconformes, por ejemplo, con el costo del peaje de otra super vía, la Carretera Siglo XXI Jantetelco-El Higuerón a 179 pesos. Un insulto. Por más tiempo que te ahorres. El gobernador no ha dicho nada. Ni tampoco Cuauhtémoc, y eso que los diputados locales ya habían hecho pública su petición de que desaparezcan diversas casetas de peaje que sangran la economía del estado. ¡Ah! También se declaró que se reubicará el monumento a Zapata, y habrá un monumento emblemático de Morelos “que nos dará identidad”. A ver si no sale como la Estela de Luz.

Blanco Bravo manifestó que se restablecerán la seguridad y paz social, pero siendo noviembre el mes más violento del año, el Almirante José Antonio Ortiz Guarneros ya comenzó a sentir la presión y ante reclamos sociales y petición de su salida por empresarios debido a la inseguridad, declaro que “su renuncia depende de la decisión del gobernador Blanco”, quien ya dijo que no se va. Así de grave, y apenas a mes y medio de asumir el poder. Total, que como se aprecia, no es lo mismo ser borracho a ser cantinero. Ni las transformaciones se dan por decreto, declaraciones, justificaciones o manotazos.

Pensemos en Edgar Degas, quien aseguró: “Es bueno copiar lo que se ve, pero es mucho mejor pintar lo que queda en nuestra memoria después de ver algo. Se trata de una transformación en donde la imaginación y la memoria trabajan juntas. Sólo se puede reproducir algo que nos golpeó, es decir, sólo lo esencial”.

Hasta la próxima entrega, donde podrán seguir leyendo lo que hay en mi mente.

Comentarios: cfelix7@hotmail.com Twitter: @CarlosFelix1


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